En el inmenso Parque Olímpico, donde se agruparán las acciones de 23 disciplinas, los movimientos de tierras, la limpieza de las aceras y el trabajo de pintura en las fachadas son parte de una cotidianeidad que pronto se transformará en ajetreo competitivo en canchas de voleibol, pista de atletismo o piscinas.
Precisamente en el exterior del Complejo Acuático Olímpico se trabaja en los detalles finales y la ornamentación de áreas verdes, circunstancia que se repite en el estadio de atletismo, y en el majestuoso velódromo que distingue una fachada pintada completamente de blanco.
El centro principal de prensa es todavía un espacio casi desierto. Solo algunos comunicadores han llegado de forma adelantada a sus instalaciones para familiarizarse con las facilidades diseñadas para una cita que se extenderá del 9 al 23 del mes en curso, y que deben animar más de 4000 jóvenes deportistas de 41 países.
Verónica, al frente del recinto que acogerá a los enviados de los medios de comunicación, sabe que es pronto para encarar las labores más complejas, pero se mantiene atenta a cada detalle o pregunta de quiénes se interesan por conocer cómo funcionarán el transporte interno o las conexiones para internet.
Las versiones digitales de los medios locales actualizan acerca de la movilización que acompañará al evento, las vías de acceso para los competidores en las diferentes instalaciones, o las afectaciones al tránsito durante la justa multideportiva, principalmente en la zona de La Costanera, donde se realizarán las pruebas de rutas del ciclismo.
Se espera que durante los Juegos se multiplique la presencia de la Policía Nacional en los puntos más importantes de la ciudad, así como de militares, bomberos y personal médico para apoyar la seguridad.
Aunque debe aumentar en los días que restan para la inauguración, comienzan a aparecer en las cercanías de los escenarios deportivos la señalética y los souvenirs con motivos del evento, principalmente en tiendas oficiales de algunos centros comerciales y espacios creados con tales fines.
Las mascotas Tito y Tika, sonrientes y coloridos gatos monteses, comienzan a verse con mayor frecuencia, señal de que cada vez está más cerca el comienzo de una fiesta continental que promete brindar grandes emociones.