La Habana.- UN NUEVO proyecto para apoyar a las jugadoras que recién hayan completado un proceso de maternidad formará parte de las prioridades de la Federación Internacional de Ajedrez (Fide, por sus siglas en francés), con el fin de lograr la igualdad de género.

Bajo el nombre de ChessMom, la iniciativa pretende brindar facilidades para que aquellas ajedrecistas con hijos menores de un año no afronten dificultades para integrar los equipos de sus países para la Olimpiada de Ajedrez de Budapest 2024, programada en septiembre.

Las jugadoras elegibles podrán viajar al certamen acompañadas por su bebé y su cuidador o cuidadora, gracias al apoyo de la Fide, que asumirá todos los gastos. Así, podrán concretar la aspiración de participar sin la necesidad de separarse de sus hijos.

«Como ajedrecista, como madre de cuatro hijos y como alguien que jugó activamente, entiendo lo difícil que es para las madres que juegan al más alto nivel hacer frente tanto a la carrera como a la vida, cumpliendo el papel fundamental que se tiene durante el primer año de nuestros hijos», dijo al respecto la georgiana Dana Reizniece-Ozola, vicepresidenta del Consejo de Administración de la Fide.

La directiva ha sido una de las más activas en los temas relacionados con la mujer y la importancia de su participación en todo lo relacionado con el Juego Ciencia, con derechos y oportunidades similares a las que disfrutan los hombres.

El proyecto, atendido directamente por la Comisión Femenina de Ajedrez de la Fide, se estrenará en la cita de Budapest 2024, pero tiene como objetivo extender su alcance a otros torneos importantes de cada temporada.

«En los últimos años hemos visto muchas iniciativas de la Fide a favor de las mujeres. Ahora abordamos el más importante en su vida adulta, la maternidad. Las jugadoras no deberían tener que elegir entre la familia y el ajedrez. Espero que este programa piloto se convierta en la norma en un futuro próximo», comentó Francisco J. Cruz, uno de los líderes de ChessMom.

Puesta en marcha la idea, corresponde ahora a las federaciones nacionales identificar aquellas jugadoras que puedan beneficiarse y trabajar de conjunto con la Fide reciban el respaldo que necesitan.