Tokio.- EL CUBANO Luis Vega se ha sumergido hoy en la piscina de sus segundos juegos olímpicos consecutivos. Sucedió en el novísimo y fastuoso centro acuático de esta ciudad.

Lo hizo en el heat de los 400 metros combinados que significó el pistoletazo de arrancada de la natación, una de las grandes vedettes de estas citas y que vivirá su primera experiencia sin público en las gradas.

Tenía cuatro rivales y no pudo derrotar a ninguno, pero eso no le quita el sueño porque su enfoque está en los 200 mariposa, la prueba en que ha mejorado más en los últimos años.

Su marca personal estaba fijada en los 4:25.05 minutos, y ahí permanecerá por un tiempo más, pues este sábado detuvo los relojes en 4:27.65.

Apenas salido de las albercas, el tritón cubano ofreció declaraciones a JIT en una organizada y muy operativa zona mixta, la primera que disfrutamos con tales atributos.

«La experiencia acá ha sido increíble, aunque ya tenía la de Río de Janeiro 2016. Me estaba preparando para la prueba de 200 mariposa, pero me invitaron inesperadamente para los 400 combinados y acepté. Fue bueno nadarlos para sentirme ya en modo competencia», comentó en principio con una toalla sobre los hombros.

«Mi principal prueba son los 200 mariposa, pero ayuda conocer cómo es el proceso de competencia aquí», aseguró con total serenidad.

«Toda mi preparación se ha enfocado en esa modalidad, tenía la marca de clasificación B y un objetivo siempre claro: venir acá a superar mi récord personal de 1:58 minutos, logrado en Kazán durante la beca recibida de la Federación Internacional de Natación (Fina)», agregó.

En cuanto a la experiencia en suelo ruso, Vega la calificó de muy positiva, al poder entrenarse con profesores de nivel de varios países, asistir a competencias internacionales y medirse a rivales de probado rango.

Su próxima aparición en los Juegos ocurrirá el 26 de julio en los 200 mariposa.

La natación vive este sábado una fecha totalmente preliminar, pero a partir del domingo empezará a entregar las medallas.