Santiago de Chile.- LA HISTÓRICA actuación de los cubanos en el tenis de mesa de los XIX Juegos Panamericanos tuvo su epílogo este viernes con los reveses en la justa por equipos.

Daniela Fonseca y Estela Crespo cerraron la fase de grupo con convincente 3-1 partidos sobre la representación de República Dominicana. Abrieron con justo 3-2 sets en dobles frente a Esmerlyn Castro y Yasiris Ortiz. En los cruces individuales, Daniela despachó a Eva Brito (3-0) y Yasiris (3-1), quien se apuntó el único éxito de las quisqueyanas por 3-2 sobre Estela.

La exigencia subió en la siguiente presentación, con las estadounidenses del otro lado de la net. Lily Ann Zhang y Rachel Sung apenas cedieron un set en el dobles ante las cubanas. De completar la barrida se encargaron Amy Wang por 3-1 frente a Lizdainet Rodríguez, y Lily Ann batiendo a Daniela 3-1.

En el evento para varones, la despedida la marcó el pulso con los argentinos, después de remontar a los mexicanos hasta imponerse 3-2 partidos, gracias a la estocada decisiva del joven Adrián Pérez sobre José Ricardo Villa, quien bajó el telón del grupo B.

Ante los gauchos la historia fue muy diferente, dado el alto nivel de sus figuras. La única victoria la consiguieron Andy Pereira y Jorge Moisés Campos en el dobles con un peleado 3-2 sets frente a Santiago Lorenzo y Gastón Alto.

En lo adelante los sudamericanos impusieron su ley. Si ante los aztecas Adrián se encargó de dictar sentencia, esta vez le tocó encajar par de derrotas en sus siguientes presentaciones, aunque mucho tuvieron que sudar Horacio Cifuentes y Gastón para imponerse en cinco mangas. El otro revés, también decidido al límite, lo encajó Andy en su partido con Lorenzo.

El triunfo puso a los argentinos como rivales de los brasileños en una de las semifinales, y la otra tendrá a los elencos de Canadá y Estados Unidos como protagonistas.

En el apartado femenino, Puerto Rico y Chile se enfrentarán por el pase a la final, objetivo que también perseguirán las brasileñas en su batalla con las estadounidenses.

METAS DESBORDADAS

A pesar de los desenlaces finales, el grupo regresará a casa con la agradable sensación de haber hecho historia en la capital chilena. La hazaña fue in crescendo desde que Daniela y Moisés aseguraron el boleto para los Juegos Olímpicos de París 2024 en la modalidad de dobles mixto, que dominaron magistralmente.

Ese título, por el que hubo que esperar 36 años, fue el detonante. Le seguiría otro de similar magnitud cuando Andy y Moisés, pareja de tantas batallas por más de dos décadas, rompieran todos los pronósticos para instalarse en el trono del dobles.

Y como si no fuese suficiente magia, Andy firmó la mejor actuación de su carrera al avanzar a la final individual, donde capituló ante el número cuatro del mundo, el estelar brasileño Hugo Calderano.

Nunca antes Cuba había ganado más de una corona en una cita multideportiva continental. Sin dudas, ha sido el merecido premio para una tropa que retorna con la certeza de haber elegido la estrategia correcta, pero también que a partir de ahora estos resultados serán el referente para continuar creciendo.