Santiago de Chile.- EL EQUIPO femenino cubano se jugará este viernes, frente a las anfitrionas chilenas, el pase a las semifinales del baloncesto en los XIX Juegos Panamericanos. Se trata de una situación extrema provocada por el revés sufrido ante Puerto Rico este jueves. 

Las dirigidas por Márgaro Pedroso salieron a la cancha del Polideportivo Uno, ubicado en el clúster del Estadio Nacional de Chile, con tanto ímpetu que hicieron pensar en un desenlace diferente al finalmente concretado.

Marcador adverso de 69-72 dejó a muchos sin entender lo sucedido, pues nuestras muchachas sufrieron una dolorosa metamorfosis a medida que el choque avanzaba.

Reiterados fallos bajo el tablero, desentendimiento entre jugadoras claves y pasividad en la defensa del perímetro, algo muy bien aprovechado por las boricuas, marcaron el descalabro, impensable tras haber dominado el cuarto inicial por 26-10.

Las primeras señales llegaron en el siguiente segmento con el 16-17 en contra. Y la certeza del "naufragio" se vivió durante la segunda mitad, cuando las cubanas apenas firmaron 27 unidades por 45 sus rivales.

«Jugamos diferente durante los dos primeros cuartos. En el tercero empezamos a desconcentrarnos y luego nos desesperamos, pero el ánimo está bien y mañana (viernes) vamos a salir a darlo todo», explicó la capitana Anisleidy Galindo, integrante del equipo ganador de la medalla de bronce en la edición de Toronto 2015.

«Los tiros de tres puntos en los momentos claves nos hicieron mucho daño», reconoció sobre el arma más explotada por las puertorriqueñas.

Las de la Isla del Encanto hicieron 30 disparos de larga distancia y anotaron 13, la mayoría después del descanso. Ello contrastó con los pocos intentos de las cubanas y su baja efectividad (cuatro de 13).

En el plano individual, Pamela Rosado se afincó como puntal ofensivo de las ganadoras y máxima anotadora del partido con 20 puntos. Ashley Torres y Tayra Meléndez firmaron siete rebotes cada una para ganar la guerra en la zona pintada.

Del lado cubano, Elianis Armenteros sirvió de referente en ataque con 16 cartones y su acierto desde el perímetro, al convertir cuatro de cinco lanzamientos.

El equipo cubano había debutado con éxito de 86-74 sobre las argentinas, gracias a un juego mucho más estable y armónico que hará falta de nuevo para encarar a las locales y un público mayoritariamente en contra.

«Somos guerreras, mañana será ir para arriba, una contra una, a no dejarlas hacer el juego y ganar. Tenemos que estar entre las dos primeras», agregó la pinareña, la de mayor permanencia sobre la cancha.

Las chilenas llegarán con el aval de haber vencido a las puertorriqueñas en su primera presentación, mas la derrota ante las gauchas este jueves (71-87) las obliga a la victoria frente a Cuba para avanzar desde el grupo A.

Muy diferente se antoja el panorama en la llave B, en que Brasil y Colombia suman par de éxitos y solo les resta su duelo particular, que definirá el primer lugar. Del ordenamiento dependerá el rival a enfrentar en la siguiente fase.