La Habana.- RECORRER buena parte de la ciudad será imprescindible para quienes pretendan presenciar la mayor cantidad de pruebas posibles en los Juegos Panamericanos de Toronto, pues la dispersión salta a la vista en el mapa de sus instalaciones.

En total son 30, situadas en 16 municipalidades al sur de Ontario, las que acogerán lo que suceda dentro de apenas dos meses en la cita continental número 17, considerada desde ya entre las más costosas de la historia.

Unas de nueva creación y otras remodeladas para ajustarlas a  los exigentes estándares internacionales darán la bienvenida a los más de 10 mil atletas, entrenadores, jueces, médicos, directivos y demás personal vinculado a la lid.

Habrá núcleos como el Parque Panamericano CIBC, asiento de cinco escenarios para más de 10 deportes y promocionado como el “centro de acción de los juegos”.

El Coliseo de Toronto es uno de ellos. Fue edificado hace casi 100 años, lo cual le permite exhibir una larga historia de conciertos y otros muchos espectáculos deportivos, y escogido para dar la bienvenida a las tres variantes de la gimnasia: rítmica, artística y trampolín.

El Exhibition Stadium para el rugby siete, el Centro de voleibol de playa Chevrolet, el Ontario Place West Channel y el Centro de Exposiciones son los otros enclavados en ese entorno.

Este último estará dispuesto para voleibol de sala, patinaje artístico, balonmano, racquetbol y squash, y en el West Channel se disputarán maratón, marcha atlética, esquí, triatlón, ciclismo de ruta y natación en aguas abiertas.

En el extremo oeste del parque funcionará el centro de radiodifusión internacional, parte del “corazón” de la cobertura periodística y la transmisión digital en función de lo cual será explotada toda la tecnología necesaria, incluidas salas de grabación y edición.

Una de las localidades nacidas para la cita es el Centro Acuático-Complejo Deportivo, cuyas obras comenzaron en septiembre del 2012 y consumieron más de 200 millones de dólares canadienses.

Es la mayor con que contará el certamen, está ubicada en el campus de la Universidad de Toronto Scarboroug y cuenta con dos piscinas de 50 metros y 10 carriles cada una, fosa se clavados de cinco metros de profundad, pista techada y otras facilidades para los entrenamientos.

De acuerdo con los organizadores el Instituto Deportivo Canadiense de Ontario trasladará sus oficinas para allí una vez concluida la justa.

El estadio de atletismo, el campo de fútbol, el velódromo y la villa son otras sedes concebidas especialmente para la fiesta, y en todos los casos ya tienen asignadas sus funciones posteriores.

La “casa” gigante ocupa un área aproximada de 32 hectáreas en la ribera del río Don y será igualmente utilizada en los Juegos Parapanamericanos antes de erigirse zona que ofrecerá viviendas a costos módicos.

Durante los juegos garantizará servicios básicos las 24 horas del día, y sus ocupantes dispondrán de un policlínico dotado de todas las facilidades médicas, así como de alimentación ajustada a las preferencias de cada uno.

Un sendero asfaltado para corredores y ciclistas marcará el perímetro del recinto, donde se alzan seis edificios de apartamentos y otras estructuras que según varios medios costaron de conjunto alrededor de 600 millones de dólares canadienses.

INAUGURACIÓN Y CLAUSURA

Contrario a lo que suele suceder en confrontaciones multideportivas las ceremonias de inauguración y clausura no acontecerán en el estadio de atletismo. Esta vez hay dispuesta una instalación solo para tales funciones.

El Rogers Centre, aledaño a la CN Tower y donde son habituales grandes espectáculos de la región, dará la bienvenida el 10 de julio a todos los países del continente con un show que incluirá al Circo del Sol y promete sorpresas para el encendido del pebetero.

OTROS SITIOS

El centro deportivo Mississauga será la única instalación con actividades durante todas las jornadas, pues en sus salas alternarán deportes de combate como judo, kárate, lucha y taekwondo.

Situado en la región del Gran Toronto, abrió sus puertas en 1998 y gracias a su multifuncionalidad ha recibido a más de tres millones de visitantes, cifra que crecerá ahora cuando divida en dos su área principal.

Muy cerca, en el propio distrito de Peel y Halton, impresiona el velódromo, otra de las novedades dotadas de todo lo demandado internacionalmente, con pista de 250 metros cubierta de madera y peraltes de 42 grados.

Con forma ovalada y tres niveles, puede asumir otras funciones y será ofrecido como centro de entrenamiento a nivel olímpico, algo muy bien recibido por los ciclistas locales, que en los últimos años necesitaron salir del país para alcanzar su puesta en forma.

Las oficinas de Cyling Canadá y Cycling Ontario radicarán allí, donde las facilidades incluyen gimnasio, área multiuso, cafeterías, depósito para bicicletas de la comunidad y un taller de reparaciones.

El Centro deportivo Oshawa, que albergará el boxeo y la halterofilia, funciona desde el 2006, ha recibido importantes actuaciones culturales y se precia de haber albergado encuentros precompetitivos del mundial juvenil de hockey sobre hielo.

Tiene capacidad para tres mil espectadores, comparte espacio con el Museo del Deporte de Oshawa y es el cuartel general de los Oshawa Generals, equipo de la liga de hockey de Ontario.

En esa misma región de York-Durham cubrirán sus calendarios el béisbol y el softbol, destinados a tres campos del Ajax de President’s Choice.

Las tareas de preparación permitieron transformar dos terrenos de fútbol en uno de béisbol, y otro ya existente fue mejorado con arcilla y césped nuevos para satisfacer las normas de la federación.

Algo similar ocurrió con los seleccionados para el softbol, que recuperaron su esplendor para situarse a altura del evento por venir.

Sin abandonar esa zona los aficionados tendrán otra opción en el Centro Panamericano Markham Atos, donde badmintonistas, tenistas de mesa y polistas disputarán sus medallas.

La polivalente instalación está abierta a la comunidad y dispone de gimnasio múltiple de más de tres mil metros cuadrados, piscina olímpica y altura necesaria para deportes como el propio bádminton y voleibol.

Aunque es de nueva construcción el estadio de atletismo está sustentado en la tradición de ese deporte en la Universidad York, cuya pista será utilizada para el calentamiento.

Sus puestos para más de 12 mil espectadores le convierten en la instalación de mayor capacidad como excelente complemento de las muchas facilidades que le asignan categoría élite. El  concurso parapanamericano celebrará allí su inauguración.

En el lado opuesto en materia de localidades disponibles se encuentra el Planet Bowl, centro de recreación reacomodado como sede para el boliche y solo dotado de 150 butacas.

El Centro Canadiense de tenis, al oeste de la Universidad York, el Centro Panamericano de BMX en el Centennial Park, y Centro Atlético Ryerson, conocido como la “Capital del hockey” pero escogido ahora para el baloncesto, son otras de las locaciones dispuestas.

Las acciones de las velas podrán ser seguidas desde las orillas de la Sugar Beach, en el Varsity Stadium concursarán los arqueros, y en el campus St. George de la Universidad de Toronto el hockey sobre césped cuenta ya con los primeros asentamientos de calibre internacional de Ontario.

En el Toronto International Trap & Skeet Club en Innisfil, a una hora de camino hacia el norte, exhibirán puntería los tiradores, y el canotaje encontró espacio en el Centro Panamericano de Aguas Tranquilas de Welland, famoso por sus cerca de ocho kilómetros de aguas profundas y plácidas.

No en balde se asegura que el nombre Welland se deriva de una palabra celta que significa “río bueno”.

El remo tendrá asiento en un lugar emblemático como el Martindale Pond, sede de la regata más grande de Norteamérica, la Royal Canadian Henley, que se celebra desde 1903, y los mundiales de 1970 y 1999.

Estos son algunos de los espacios más significativos, y todos, al decir de los anfitriones, estarán en condiciones de responder a las expectativas creadas.