La Habana.- ESTIMULA reconocer que, pese a no pocas insatisfacciones, otra vez el Inder demostró capacidad de multiplicarse desde la comunidad para responder positivamente a los varios procesos que marcaron un 2025 también exigente en el ámbito competitivo.

Fue esa la característica de una etapa en que nuevamente miles de hombres y mujeres mantuvieron en alto el orgullo de aportar desde un organismo formador, defensor de un deporte que el Comandante en Jefe Fidel Castro convirtió en derecho del pueblo.

Sumados al propósito de tributar acciones concretas a todos los 10 objetivos del Programa de Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía, nuevamente primó la consagración que caracteriza a los educadores cubanos.

Todo ello, con el mérito adicional que implica enfrentar limitaciones acrecentadas por el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, que solo en los últimos ocho años ha afectado al Inder en todas sus actividades, con un monto equivalente al presupuesto que este requiere para tres.

Convertimos en ejercicios de aprendizaje colectivo la posibilidad de recibir una visita gubernamental, rendir cuenta a la Asamblea Nacional del Poder Popular y concluir la construcción de la primera Ley del Sistema Deportivo Cubano y sus seis normas complementarias.

En todos los casos, asumidos como oportunidad de acrecentar nuestros vínculos con el pueblo, que encontró espacios para opinar y exponer propuestas, mayoritariamente aceptadas, que enriquecieron esos procesos y las acciones diseñadas para su seguimiento.        

El 2025 fue también el año en que celebramos el vigesimoquinto aniversario de la Comisión Nacional de Atención a Atletas, como homenaje a Fidel, su creador, y organizamos la II Feria Internacional del Deporte Cubano y la XI Convención Internacional de Educación Física y Deportes, consolidados como escenarios comercial y científico, respectivamente.

A propósito, fue una etapa de crecimiento de la ciencia y la innovación, con el Centro de Investigaciones del Deporte Cubano, el Instituto de Medicina del Deporte y la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte Manuel Fajardo como pilares, y se sumaron alianzas con otras instituciones.

Competitivamente, resultó un período que permitió evaluar a parte de nuestra reserva deportiva, en los II Juegos Panamericanos Júnior de Asunción y los VI Juegos Parapanamericanos Juveniles de Chile, y otros certámenes importantes.

En la capital paraguaya, fue significativo obtener 17 plazas para los Juegos Panamericanos de Lima 2027, acceder a 19 títulos, 13 medallas de plata y 15 de bronce, y ubicarnos en el séptimo lugar con una delegación de 216 competidores que intervinieron en 170 de las 336 pruebas programadas.

Menciones especiales para la canoista Yisnoly López, dueña de tres reinados y un bronce, la coronación de la luchadora del estilo libre Yaynelis Sanz (57 kg), que defendió la disfrutada en la cita anterior, y los cuatro récords para los Juegos impuestos en el atletismo.

También séptima se ubicó la delegación de 26 concursantes que nos representó en la cita parapanamericana, regresada a casa con 12 cetros, 13 subtítulos y cuatro bronces firmados por paratletas (8-8-2) y parapesistas (4-5-2), disciplinas a las que se añadieron paratenis de mesa y parajudo.

Las palmas para Amalia González (45 kg), quien acuñó un cuarteto de metales dorados, distribuidos a partes iguales en eventos individuales y por equipos, y celebró récord del orbe (91 kilos), como continuación de su desempeño en la Copa del Mundo igualmente disputada en esa urbe, donde Cuba se llevó ocho de oro, siete de plata y dos de bronce.

El carácter humanista e inclusivo de nuestro deporte tuvo otra hermosa expresión en los XXV Juegos Sordolímpicos, disputados en Tokio, donde Suslaidy Girat respondió a la altura de su grandeza con reinado en el salto de longitud y segundo lugar en el triple salto.

Con 21 concursantes en cinco deportes, presencia superior a la conseguida en la versión precedente, la Isla se ubicó en el lugar 30 entre 81 países gracias a una medalla de cada color, y Suslaidy se convirtió en la atleta más laureada en citas olímpicas del deporte no convencional con sus 13 preseas.

Aunque esperábamos más, los campeonatos mundiales también dejaron buenas noticias, con protagonismo para la triplista Leyanis Pérez, impuesta por partida doble, al aire libre y bajo techo, y tributó los únicos oros de una colección que en el ámbito convencional se completó con cinco platas y siete bronces.

Rubricar tres de esos segundos escaños hicieron de la pesista Marifélix Sarría (+86 kg) otro referente de la temporada, menos feliz para un deporte insignia como el boxeo (0-0-4), y otra vez grande para el saltador de longitud Robiel Yankiel Sol Cervantes (T46), quien sumó su tercer baño dorado en campeonatos mundiales de paratletismo.

Aconteció en Nueva Delhi. Cuba inscribió a siete participantes y seis llegaron al estrado, con los jabalinistas Ulicer Aguilera (F13, plata) y Guillermo Varona (F46, bronce) como sus otros premiados, y el primero de ellos autor de récord continental. Punto culminante de una campaña que dejó otras páginas felices para esa disciplina, como sus colecciones de 6-4-1 y 8-2-0 en los Grand Prix de Túnez y Bogotá.

Lo mejor en lides universales juveniles corrió a cargo del equipo de Baseball5 y el raquetbolista Cristian Menéndez, campeones en México y República Dominicana, en ese orden. El conjunto tuvo baluartes como Carlos Alejandro Rivera y Rachel de la Caridad Medina, premiados como Jugadores Más Valiosos, y Menéndez reeditó el dominio ejercido un año antes.

Lugar especial en este resumen para la presencia Liván Moinelo y Raidel Martínez en la Liga Profesional Japonesa de Beisbol. El abridor zurdo ganó la corona del torneo con los Halcones de SoftBank y lideró ambos circuitos con efectividad de 1.46 pcl. Válido para la condición de Jugador Más Valioso de la Liga del Pacífico. El diestro firmó récord personal de juegos salvados (44) con los Gigantes de Yomiuri.

El pugilismo brilló en circuitos profesionales, con triunfos en los 19 pleitos celebrados, acceso a varios títulos de la Asociación Mundial de Boxeo, Lázaro Álvarez como líder en ese frente, al retener tres veces el continental americano, y Julio César La Cruz proclamado retador obligatorio del ruso Muslim Gadzhimagomedov, rey universal crucero de esa organización.

En la categoría sénior, se impone resaltar que luego de imponerse a nivel continental la Gran Maestra Maritza Arribas se agenció bronce mundial en Gallipoli, donde compartió protagonismo con la escocesa Ketevan Arakhamia-Grant y la legendaria sueca Pia Cramling, primera y segunda, respectivamente.

En casa, los 61 Juegos Escolares Nacionales se erigieron en demostración de esfuerzos compartidos, fórmula imprescindible para sobreponerse a obstáculos y propiciar que 6 236 atletas animaran su calendario en 38 sedes que también acogieron eventos científicos y otras actividades. La Habana (587 puntos), Santiago de Cuba (497) y Cienfuegos (469) ocuparon la vanguardia.

Lides pioneriles y juveniles también fueron parte del constante movimiento en esas edades, vitales en la estructuración de un deporte que necesita ver replicados los buenos ejemplos que le distinguen en cuanto a recuperación de instalaciones y mejoramiento general de las condiciones creadas en las Eides y otros centros, a los que se añadió la recuperada Escuela Superior de Perfeccionamiento Atlético, con un claustro agrupado como Contingente Manuel “Piti” Fajardo.

En medio de la estabilidad y los avances en relación con el proyecto de Recreación y uso del tiempo libre, que el Inder dirige a nivel nacional, el 2025 dio paso al proyecto Toma Deportiva Siempre Joven, llegado cada fin de semana a todo el país como manifestación de integración y participación comunitaria, revitalizando los barrios y fomentando valores inclusivos.

Con más de 50 000 eventos realizados y la impresionante cifra de 2,5 millones de participaciones, la iniciativa ha calado profundamente en la población. Las calles, como principal escenario, se han ratificado como espacio clave para la recreación y el fortalecimiento de los lazos sociales, lo que acrecienta la proyección de su crecimiento.

Los esfuerzos combinados de activistas, miembros de las peñas deportivas y otros actores de la comunidad, junto a organismos e instituciones como Educación, Cultura, Salud, y las organizaciones de masas, por solo citar algunos, han permitido pasar sobre carencias materiales para que este proyecto se sume a otros ya establecidos como el sistema de carreras que tiene en su cima a Marabana, animado este año por más de 3 000 participantes de 42 países.

En otros frentes que igualmente requirieron de alternativas, se jerarquizó el sistema empresarial, con énfasis en la generación de ingresos y el papel que desempeña la Sociedad Mercantil Cubadeportes S.A, acentuada como principal sostén en ese orden, además de lo concerniente al régimen especial de seguridad social para atletas activos categorizados y a las glorias del deporte, en función de los cuales habrá que seguir trabajando, más allá del organismo.

Ascendió el número de profesionales contratados en el exterior, avanzan la gestión de eventos en casa y la exportación de bienes y servicios, y continúa el vínculo con atletas que se desempeñan en circuitos profesionales sin el amparo de nuestras federaciones nacionales y desean representar a Cuba.

Contrario a esa realidad, y a las facilidades ofrecidas a todos los interesados en asistir a eventos organizados en Cuba, cierra un año en que Estados Unidos negó o no otorgó 68 visas a deportistas, árbitros y directivos del deporte, una cifra sin precedentes que pone de manifiesto una política ajena a los preceptos del olimpismo.

Es fácil entender que además de frustrar el derecho a participar en certámenes convocados de enero a la fecha en ese país, tal postura provoca un ambiente de incertidumbre e inseguridad que atenta contra la preparación de cara a los Juegos Olímpicos de los Ángeles 2028 y otras competiciones, incluido el VI Clásico Mundial de Beisbol.

Como contrapartida, el Inder acentuó su accionar en el campo de las relaciones internacionales, a partir de lo que significa el deporte como conquista de la Revolución, con destaque para nuestros vínculos con países hermanos como Rusia y China.

Todo lo realizado ha tenido importante sustento el permanente y fluido vínculo con nuestras estructuras y las autoridades de los territorios, como fruto de lo cual damos seguimiento a tareas inherentes a los programas de gobierno, incluidas las relacionadas con lucha contra la colonización cultural, la violencia de género, y la discriminación de la mujer y manifestaciones de racismo.

Han constituido prioridad el control interno, la superación, incluida la diseñada para las glorias, mejor planificación y uso de los recursos, acciones inherentes a la labor político ideológica, la planificación, la política de cuadros, y el fortalecimiento de las áreas jurídica, de informatización y comunicación institucional, a tono con las demandas actuales.

Damos la bienvenida a un 2026 de altísimo significado para un organismo que celebrará su aniversario 65 con muchísimas razones para que el centenario del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz se convierta en motivación especial para derrochar iniciativas que le mantengan como conquista de la Revolución.

Es también el año de los aniversarios 50 del monstruoso crimen de Barbados y 60 de esa página de dignidad y decoro que constituyó la travesía del buque Cerro Pelado ante el intento yanqui de impedir la presencia de Cuba en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Juan, Puerto Rico.

Inspirados en sus significados, enfrentaremos los muchos retos que impone la sostenida agresividad del imperio, dispuestos a merecer el aplauso de nuestro pueblo en eventos como los XXV Juegos Centroamericanos y del Caribe, los I Juegos Paracentroamericanos y del Caribe, los VI Juegos Panamericanos de la Juventud Sorda y los VI Juegos Olímpicos de la Juventud, sin apartarnos de otras misiones no menos importantes.

¡Unidos por Cuba, seguimos en combate!