La Habana.- EL HOMENAJE del deporte cubano al Guerrillero Heroico en el aniversario 90 de su natalicio sumó hoy otro momento impactante cuando la selección de boxeo clasificada para los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe celebró su activo de la Dignidad.
Justo donde Ernesto Guevara estableció su Comandancia, en el Parque Histórico Militar Morro Cabaña, la dotación que reúne a medallistas olímpicos y mundiales ratificó la voluntad de pelear por las ocho coronas a su alcance en la venidera cita regional.
«Comprometidos con nuestro pueblo, nuestro Partido, nuestro histórico líder Fidel Castro Ruz y el General de Ejército Raúl Castro Ruz, viajaremos a Barranquilla dispuestos a poner en alto el coraje y la dignidad de la Revolución», dijo el capitán de la escuadra, Julio César La Cruz.
«Nos acompañan el ejemplo de los héroes y mártires de las luchas por nuestra independencia, el orgullo de sentirnos cubanos y la conciencia de que somos hijos de un pueblo heroico, merecedor de cualquier sacrificio», sentenció el cuatro veces rey del orbe.
Sus palabras siguieron a un material audiovisual que mostró al Che en diferentes facetas de luchador incansable y ser humano excepcional, al tiempo que se escuchaba su llamado a no flaquear por duras que sean las circunstancias.
Luego todos los miembros de la dotación firmaron el libro que recoge el compromiso expresado y fue puesto en manos del presidente del Inder, Dr. C Antonio Becali Garrido, quien entregó a La Cruz la bandera a defender en suelo colombiano.
Los titulares universales Lázaro Álvarez y Andy Cruz depositaron una ofrenda floral ante un busto que perpetúa la memoria del ejemplar combatiente, y el comisionado nacional Alberto Puig ratificó que cada escalada al cuadrilátero será muestra de apego a los principios.
«Asumiremos el reto motivados por el privilegio de sabernos herederos de una larga tradición de lucha y exponentes de lo que significan el Che y Maceo, de cuyo natalicio se cumplen hoy 173 años», sentenció el también presidente de la Federación Cubana de Boxeo.
El colofón permitió a los visitantes, entre quienes estuvieron glorias de ese deporte como Armando Martínez, acercarse más a fondo al lugar desde donde el Comandante Guevara dirigió las misiones que le fueron asignadas al llegar a La Habana tras el triunfo revolucionario de enero de 1959.
Lo sucedido allí devino continuación de otros momentos emocionantes vividos por el atletismo y el béisbol como parte de un proceso convertido en muestra de apego a la decisión de satisfacer el propósito de retener la corona por naciones en la justa barranquillera.
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