La Habana.- LA DISPUTA entre equipos cubanos destaca en cada lid, especialmente en el icónico Triatlón de La Habana, cuya séptima edición debió celebrarse en marzo, pero la COVID-19 lo impidió.

Wassabanga se incluye entre los líderes de un nutrido grupo que prestigian además Yogurt Team, Giros Team, JP3 y 3 en 1, este último formado por el mejor exponente varonil de la disciplina en Cuba, Michel González Castro.

«Wasabanga es una expresión de fiesta y alegría. Una persona “wasabanguera” es fiestera y gozadora. Y eso es para nosotros el triatlón: fiesta», dijo a JIT Alberto Varona López, fundador del grupo, ingeniero eléctrico y trabajador del Despacho Nacional de Carga del Sistema Electroenergético Nacional.

«Muchos como yo pertenecen a dos clubes a la vez. Estoy en Wasabanga y Cannibal Team. El primero me abrió las puertas; el segundo lo creamos varios compañeros del Despacho. Me entreno con ambos», destacó el entusiasta joven en un momento de descanso en áreas contiguas al Estadio Panamericano, al este de La Habana.

«Aunque existen varios clubes, nos llevamos muy bien. Formamos una gran familia», señaló quien profesa perenne agradecimiento hacia los profesores Aurelio Romero Santana, preparador del equipo nacional de paratriatlón, y Dioseles Fernández Acanda, profesor de Leslie Amat Álvarez, nuestra promesa olímpica para Tokio 2020.

«Ellos ayudan muchísimo. Permiten que sin ser atletas de alto rendimiento nos entrenemos con los mejores de Cuba; sugieren métodos de alimentación y recuperación para antes, durante y después de cada adiestramiento y competencia. Estamos muy agradecidos por eso, ya que no tenemos la misma preparación física. Nos tratan como si fuéramos deportistas élites», abundó.

Entrenar y trabajar es muy complicado, porque lo primero depende del tiempo libre de cada cual y lo segundo resulta primordial en toda sociedad.

«Casi todos los integrantes de Wasabanga somos profesionales. Le pongo mi ejemplo: trabajo 24 horas y descanso dos días. Cuando no puedo ir llamo a Aurelio o Dioseles y les pregunto qué hicieron y trato de actualizarme. Todo a mi ritmo, por supuesto, y en dependencia del nivel de agotamiento que tenga», explicó.

SUEÑOS Y CONQUISTAS

Competir a nivel internacional constituye meta de todo deportista. Para los cubanos se antoja complicado por diversas razones, pero no hay obstáculos imposibles de superar para quienes sueñan en grande.

«Como evento internacional de rigor, el único disponible es el Triatlón de La Habana, al que no he faltado en las tres últimas ediciones. Es fuerte y especial para nosotros, porque se desarrolla en casa. Hacemos muchos amigos y nos divertimos de lo lindo. Lo esperamos y nos preparamos como si se tratara de unos juegos olímpicos», aseguró.

«No he participado en ninguna lid en el exterior, pero tengo planes para —si la pandemia lo permite— asistir este año al Ironman 70.3 (1.9 km de natación, 90 km de ciclismo y 21 km de carrera) de Cozumel, en México», confirmó.

«En dependencia de cómo ocurra esa primera incursión regresaré el año que viene con mayor preparación, para poder hacer el Ironman completo (3.8, 180 y 42, respectivamente)», precisó.

«Claro que cuesta, pero si lo disfrutas al máximo viene a ser un vicio sano. Vale la pena disfrutar y no importa el sacrificio si cuidas a la familia, que es lo más grande», finalizó.

HERIC EL TAXISTA

Heric Héctor Mena Menocal figura entre los más longevos del Wasabanga. Con 48 años de edad y cinco practicando el triatlón, sobresale por las cuotas de sacrificio entregadas con jovialidad permanente.

Trabajador de las tiendas TRD, este mulato delgado suma experiencias del pasado como nadador en Alamar y corredor en una Pre-Eide. Incluso jugó béisbol, como buen cubano, aunque su sueño fue siempre el ciclismo.

«Cuando entré al servicio militar y luego al Ministerio del Interior hice poco deporte. Me limitaba a la preparación física. Sin embargo, asistí a varias copas Capitán San Luis con buenos resultados en atletismo», recordó.

«Estando como cocinero en la Cardín (Escuela Superior de Formación de Atletas de Alto Rendimiento Giraldo Córdova Cardín) se me acercó el profesor Aurelio y me propuso entrenar con los muchachos del equipo nacional. Me gustó mucho, tanto que ahora es prioridad en mi vida», aseguró.

Para Heric este movimiento no significa solo correr, nadar y hacer ciclismo, pues confraternizan, se visitan y están atentos para ayudar a los compañeros en lo que sea necesario.

«Como fui nadador y corredor no me costó gran trabajo ponerme en forma, solo debí hacer un poco de ciclismo. ¡Y ahora el talón de Aquiles es el nado!», confesó.

Aun así, Heric sobresale entre los integrantes de Wasabanga, pues llegó al podio en las ediciones del Triatlón de La Habana en que participó. Atesora tres títulos y una plata en la categoría popular.

«En el pasado Triatlón de La Habana ocupé el lugar 13 entre todos los corredores. Hoy le digo que no puedo vivir sin el triatlón, y como yo varios colegas de la categoría máster han hecho de este deporte su razón de vida», finalizó.