La Habana.- LA CUBANITA Anisley García se declaró motivada para enfrentar la Copa del Mundo que comienza mañana en Río de Janeiro, Brasil, y que repartirá los últimos boletos para el torneo olímpico de clavados.

«Estoy lista para competir, hoy hice mi último entrenamiento desde los 10 metros y ya me adapté a la piscina», dijo a JIT vía facebook la plataformista que apenas cumplió 14 años en enero pasado.

«Llegué hace cinco días y me he sentido muy bien en la instalación, que está genial», agregó “La Tuti” como es conocida por sus compañeros la varias veces premiada en los torneos CAMO que organiza Canadá.

Sin embargo, la alumna del destacado entrenador Lino Socorro enfrentará ahora su prueba de fuego, pues nunca antes se vio exigida a ese nivel y tiene como objetivo quedarse con una de las 18 plazas en disputa.

«Creo que no es imposible, puedo hacerlo y voy competir para eso», comentó tras su sesión en el centro acuático Maria Lenk, el escenario a cielo abierto que fue sede en los Juegos Panamericanos en el 2007 y acogerá la fiesta cuatrienal.

La chica de la isla y su técnico han reiterado que pese a no depender de un programa de alta complejidad, ejecutarlo como desean puede reportar más de 290 puntos y asegurarle en semifinales.

Según el sitio web oficial entre las 38 inscritas para esa prueba, programada para la tarde del sábado, están las chinas Qian Ren y Yajie Si, números uno y dos del ranking mundial, respectivamente.

La ucraniana Yuliia Prokopchuk, la francesa Laura Marino, la canadiense Roseline Filion y la malaya Pandelela Rinong Pamg, son otras candidatas con buenas actuaciones en justa importantes.

El campeonato del orbe del año pasado en Kazán, Rusia, validó pasajes olímpicos para sus 12 finalistas, por lo que los puestos que ahora ocupen algunas de ellas serán corridos, lo que hace menos complicado que entonces acceder a cupos.

En la cita se convocó el resto de las especialidades, incluida la plataforma para hombres, donde Cuba exhibe sus mejores saldos pero quedó sin opciones por la lesión que impidió a Jeinkler Aguirre acompañar a José Antonio Guerra en la modalidad sincronizada.