CON UNA buena inyección dorada de halteristas, gimnastas y judocas, Colombia se consolidó en el tercer lugar del medallero de los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe y tomó distancia de Venezuela, ubicado cuarto.

Los cafeteros llegaron a 39 de oro, 42 de plata y 40 de bronce para alejarse de los vinotintos, que totalizan 34-35-52. México sigue inamovible al frente (58-43-54), escoltado por Cuba (47-30-42).

UNA FALLA mecánica evitó que el equipo de pistola de Puerto Rico entrara al cuadro de medallas, pues Luis López que fue el último en disparar ayer en el polígono de la Academia de la Policía El Lencero confrontó problemas con el 'firing pin' de su arma y no pudo prácticamente disparar en la prueba de 20 segundos.

“Todo empezó a mitad de competencia. La pistola me empezó a fallar, pero yo pensaba que era la bala. Le digo a mi coach que me consiguiera otras balas, pensando que eran las balas mías. Me consiguieron otras balas. Tiré las primeras cinco de esa caja y funcionó bien y yo dije pues son las balas”, relató López mientras abandonaba el polígono con sus compañeros Giovanni González y Luis Rivera.

López había acumulado puntuaciones de 187 y 187 en sus primeras series, pero en el tercer tiempo solo acumuló 46 puntos y de haber tirado sin problemas el bronce por equipo, que obtuvo Guatemala con 1 617, hubiera sido una opción real.

A ESE ritmo, pronto no serán las “Reinas del Caribe”, sino las “Reinas de Centroamérica”. Y es que durante los juegos de Veracruz eso quedó confirmado de una estruendosa manera porque la selección dominicana de voleibol femenino se llevó la cuarta medalla de oro seguida a este nivel.

Ha sido un año fuera de serie para las dominicanas que son dirigidas por el brasileño Marcos Kwiek. “Fue un año de mucho trabajo”, dijo el técnico. “Cumplimos nuestros objetivos con éxito y seguro que podemos lograr más”.

Kwiek está convencido de eso, pero igual sostiene que para llegar así hace falta trabajar para mejorar algunos aspectos del juego. Sin embargo, Veracruz no es un buen ejemplo para encontrar debilidades dentro de la escuadra que es capitaneada por Bethania de la Cruz.

La tropa tricolor se llevó el oro sin perder un solo set, y entre sus víctimas estuvo Venezuela (25-6, 25-15 y 25-16), Colombia (25-22,25- 21 y 25-17), Cuba (25-20, 25-19 y 25-19), México en seminales (25-11, 25-23 y 27-25) y Puerto Rico en la final (25-19, 25-19, 25-19). “Ese no era el plan, nunca nos planteamos no perder un set”, admitió Kwiek. “La meta siempre fue ganar el oro como sea”, agregó. (ERL)