Lima.- ISMAEL Borrero (67 kg) y Gabriel Rosillo (97 kg) buscarán hoy las primeras medallas de oro de la lucha grecorromana cubana en los XVIII Juegos Panamericanos, tras una jornada preliminar que dejó varios sinsabores al elenco dirigido por el profesor Raúl Trujillo.
Las cosas no comenzaron bien para la favorita escuadra de la Isla en el Coliseo Miguel Grau, de Callao, pues el doble rey continental Luis Orta (60 kg) cedió de forma increíble ante el ecuatoriano Andrés Montaño, quien ganó 6-0 a falta de segundos para el pitazo final.
Luego las acciones comenzaron a fluir, sobre todo para los santiagueros Borrero y Rosillo. El primero, rey olímpico y mundial de los 59 kg, liquidó por superioridad técnica y sin puntos en contra al dominicano Luis de León y al estadounidense Ellis Coleman.
El segundo, monarca continental juvenil y de mayores en esta temporada, aplastó de idéntica forma al venezolano Luillys Pérez y al dominicano José Arias.
Lo contrario sucedió con Yosvanys Peña (77 kg) y Daniel Gregorich (87 kg), vencedores en cuartos de final, pero víctimas en semifinales ante oponentes asequibles a sus niveles técnicos y competitivos actuales.
Peña debutó con sonrisa de 6-0 sobre el dominicano Johan Batista, pero después cayó 2-5 ante el venezolano Wuilexis Rivas.
Gregorich, subcampeón mundial sub-23 años, dispuso por superioridad del dominicano Carlos Adames y después fue sorprendido por el también morocho Luis Avendaño, quien con un empujón al torso le propinó impensada pegada.
En la jornada vespertina, con inicio a las 4:30 p. m., Borrero buscará su primera corona en juegos panamericanos ante el venezolano Shalom Adonais Villegas Requena, tercero este año en el campeonato continental.
Rosillo igual tratará de estrenarse en lo más alto del podio, para lo cual deberá batir al estadounidense Tracy Hancock, a quien venció hace apenas semanas en la final de la lid continental.
Orta, Peña y Gregorich buscarán medallas de bronce como consuelo a una jornada en que pretendían mucho más.
Luis se las verá con Antony Javier Palencia (VEN), tercero esta temporada en la justa americana; Peña con el discreto brasileño Angelo Marques; y Gregorich contra el colombiano Jair Alexis Cuero, medallista centrocaribeño y panamericano en esta división.
La armada grecorromana cubana tiene previsto superar la actuación registrada en Toronto 2015 (2-0-2), algo que aún puede suceder en términos dorados y generales si se imponen Borrero, Rosillo y Mijaín López (130 kg), este último citado el jueves a los colchones limeños.
TRUJILLO Y LA DIFICULTAD PARA EXPLICAR
Concluida la jornada matutina, JIT conversó en la zona mixta con el entrenador jefe del plantel Raúl Trujillo, quien visiblemente contrariado ofreció sus pareceres…
«Increíble que nos sucedan estas cosas: combates “ganados” como el de Orta y se cambia la táctica sin razón. La lucha no perdona, si aflojas o te confías, pierdes. Para mí es inexplicable esa pelea, tratándose de un atleta con experiencia y bien preparado, quien ha luchado incluso en la Bundesliga Alemana», expresó con su gentileza habitual.
«El ecuatoriano fue oro en el campeonato panamericano pasado, por eso era la pelea más importante para el nuestro. No sé aún qué había en la mente de Orta. Seis puntos de ventaja para un luchador de experiencia es bastante, sobre todo si queda poco tiempo», agregó.
Sobre lo sucedido con Peña reiteró que «no se puede aflojar, cuando un atleta está perdido se desespera. Los venezolanos se están tirando a adivinar porque saben que a lucha no pueden ganarnos. Nosotros no hemos estado atentos a las acciones, se ha perdido la concentración. No sé si es presión…».
En cuanto a Gregorich confirmó la apreciación de que lo sorprendieron con un empujón de gran fuerza. Luego reconoció que «resulta increíble como a un equipo que podía ir a casi todas las finales se le escapen tantas por descuidos. No ha sido falta de garra, se ha luchado fuerte, pero como entrenador me parece inexplicable esto después de la tremenda preparación que hicimos».
A Borrero y Rosillo dedicó menos palabras, pero bastó con decir que «tienen un alto nivel, están concentrados, saben qué hacer y son de otra “madera”».
Trujillo, no obstante, alertó que los perdedores hoy estaban considerados para ganar metales bronceados y todavía pueden cumplir ese propósito. Sostuvo su aspiración de que este par finalista, más Mijaín el jueves, hagan realidad el sueño de superar lo hecho en Toronto 2015.
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