Santiago de Chile.- LA MESA está servida. Cuba saldrá este viernes a la Arena O´Higgins para enfrentar a Argentina por el pase a la final del torneo de voleibol de los XIX Juegos Panamericanos.

Se trata de la revancha respecto a la final de la edición anterior, celebrada en Lima 2019, cuando los sudamericanos se impusieron en apenas tres mangas.

También se trata de una cita con la historia para los albicelestes, pues si triunfan seguirá en pie la posibilidad de lograr el triplete dorado, algo que solo han firmado los cubanos con la generación que mandó en las justas de 1971, 1975 y 1979.

La armada de Jesús Cruz venció a México (3-2 sets) y Colombia (3-0) en la fase de grupos, antes de caer ante Brasil en cinco parciales.

Los argentinos superaron en línea a Puerto Rico, República Dominicana y Chile, con apenas un set cedido en su segunda presentación.

Ahora subirá la presión para los vigentes campeones, por la potencia ofensiva de los cubanos y los liderazgos del estelar Miguel Ángel López y el joven Alejandro Miguel González, fundamentalmente.

Del otro lado, será un dolor de cabeza el buen manejo del balón y la corrección técnico-táctica que distingue a los jugadores argentinos.   

Nuestro equipo superó este jueves la fase de cuartos de final en cerrado partido ante Puerto Rico, definido con pizarras de 25-16, 25-21, 13-25, 22-25 y 15-11.

Lo que parecía una barrida se convirtió en una “locomotora de tensiones” hasta el tie break, aportando cansancio a una nómina sin mucho recambio y llamada a un tremendo duelo este viernes.

Los 23 tantos de López, los 15 de Miguel David Gutiérrez y los 11 de Alejandro cobraron protagonismo en la importante victoria. Volvieron a preocupar los 33 errores no forzados cometidos, por solo 16 los boricuas.

Para derrotar a los albicelestes habrá que atacar con el servicio para afectar su complejo uno; disminuir los tantos regalados por errores y lograr una mayor efectividad en los contragolpes. Damos por descontado la fuerza de nuestro ataque y las posibilidades del bloqueo.

Cuba no gana los juegos panamericanos desde Winnipeg 1999, hace casi un cuarto de siglo. Es hora…