Por Eyleen Ríos, enviada especial

Barranquilla.- EN OCASIONES las coincidencias hacen cambiar lo importante, el detalle que marca la diferencia obliga a variar prioridades, y tal como aconteció para Cuba en la cuarta jornada del atletismo de estos Juegos Centroamericanos y del Caribe.

Sucede que en cualquier otro día el inicio de la noticia hubiese sido el triunfo de la heptalonista Yorgelis Rodríguez, logrado con récord para estas citas y amplísima diferencia sobre el resto de las competidoras, pero hubo otro oro sacado del Estadio Rafael Cotes que centró el foco de la atención.

Rose Mary Almanza se hizo de su segunda corona, mas lo espectacular del hecho es que la consiguió en su debut internacional en los 1500 metros planos y que además constituye la primera de la Isla coronada en esa modalidad en los certámenes centrocaribes.

«Sabía que estaba preparada y me propuse hacerlo bien, quería estar entre las medallistas, pero no pensé en el oro», confesó todavía con la respiración entrecortada por el esfuerzo de una carrera ganada con 4:22.14 minutos y no exenta de “empujones” y “cierres”.

«Fue complicada, me cerraron más de una vez, pero yo había trazado mi estrategia de ir detrás y rematar en el final, y lo cumplí», resumió Almanza, líder de los 800 metros y todavía por participar en el relevo 4x400 este jueves, cuando pudiera convertirse en la única miembro de su delegación con tres cetros en el atletismo.

«Voy por más, mis compañeras y yo vamos por más», ratificó quien hace dos días mantuvo su corona de Veracruz 2014 en el par de vueltas al óvalo.

Para Yorgelis los dos días de trabajo parecieron fáciles, pero solo eso, parecieron… La cuarta del mundial de Londres 2017 estuvo cerca de sus máximos registros en casi todas las pruebas, e incluso se superó en la jabalina con 48,96 metros.

Además, elevó a 6 436 puntos el récord de estas lides, 452 por encima del que había impuesto en Veracruz 2014.

«Estoy súper contenta, sabía que podía llevarme esta medalla y así fue. La representante de Colombia estuvo en su mejor competencia, pero siempre respondí en los momentos claves», comentó sobre lo sucedido.

Ahora queda pendiente saber si se presentará este jueves en el salto de altura individual, una interrogante que dejó sin respuesta por ahora.

En el resto de las jornadas se “sacaron” otras cuatro medallas, dos de ellas de plata con Yoandys Lescay en los 400 metros planos y Yaniuvis López en la impulsión de la bala.

Lescay corrió lo mejor de su año con 45.37 segundos, pero era muy difícil quitarle el oro al dominicano subcampeón olímpico Luguelín Santos (44.59), como tampoco parecía posible que Yaniuvis arrebatara el cetro a la trinitaria Cleopatra Borel.

La cubana tiró 18,03 metros y la campeona 18,14 para mantener un premio que es suyo desde Mayagüez 2010.

Los bronces emergieron de la jabalina de Yulenmis Aguilar (55,60 metros) y Liadagmis Povea (14,44 metros), en par de resultados ajustados a lo previsto.

Sobre todo el segundo de ellos, pues era poco probable que alguien dejara sin protagonismo a la estrella local Caterine Ibargüen, convertida nuevamente en show de una instalación que le veneró como cuando se coronó en la longitud.

Esta vez ganó con 14,92 metros de récord para los Juegos y además se convirtió en la segunda mujer en la historia que domina ambas pruebas en una misma cita. La otra es la cubana Niurka Montalvo, cuando aún competía por la Isla, en Ponce 1993.

Hasta el momento Colombia lidera el llamado deporte rey con ocho oros, uno más que Jamaica, y dos por sobre Cuba.

Como curiosidad son las mujeres las grandes aportadoras de esos títulos a la causa cubana, pues solo el decatlonista Leonel Suárez hace la excepción. 

Los otros tronos, además del doblete de Almanza y el heptatlón de Yorgelis, emergieron de la pértiga de Yarisley Silva y el disco de Yaimé Pérez.