MUY POCAS mujeres dirigen los ministerios del deporte en América y entre todas solo una es campeona olímpica: la colombiana María Isabel Urrutia.

Desde hace pocos días la legendaria deportista, medallista de oro en la halterofilia de los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, ha comenzado a asumir sus primeros retos en el deporte como parte del gabinete del izquierdista Gustavo Petro.

Ha dicho que una de las batallas más duras que promete librar es la de profesionalizar el trabajo de la mujer futbolista.

La primera campeona olímpica en la historia de Colombia y medallista de oro en los campeonatos del mundo de levantamiento de pesas de 1990 y 1994, figura también como la primera mujer en desempeñarse en esa cartera en un país donde, no obstante las dificultades a vencer en el acceso universal a la práctica deportiva, ha logrado un progreso evidente en el escenario continental y en la capacidad para organizar grandes competiciones.

En el plano de los compromisos internacionales, Urrutia –de 57 años de edad- enfrentará de inmediato la organización, por primera vez en la historia de la nación, del campeonato mundial de halterofilia en Bogotá. Será algo significativo para ella por tratarse del deporte que la encumbró. También tendrá la responsabilidad de los preparativos de los Juegos Panamericanos de Barranquilla 2027.

En noviembre próximo, la nueva ministra hará su primera aparición en un evento multidisciplinario en casa con los I Juegos Centroamericanos y del Caribe de Mar y Playa de Santa Marta 2022, pero semanas antes tendrá su debut en los Juegos Suramericanos de Asunción 2022, previstos del primero al 15 de octubre.

Por lo pronto, en el plano doméstico Urrutia se estrenó hablándole fuerte a los presidentes de los equipos colombianos por el tema de la liga femenina, durante una entrevista radial, en busca de las condiciones más favorables posibles para las futbolistas, un deporte en que consiguieron el segundo lugar en la última copa América y en que desde este miércoles esperan una faena digna en el certamen mundial sub-20 que comienza en Costa Rica.

«Para mí, como feminista y mujer que me tocó llegar a un deporte totalmente masculino y romper los esquemas, no es fácil. Ya conozco eso y he venido trabajando con los actores que tienen que ver con el fútbol femenino», declaró Urrutia, quien dirigió la liga de levantamiento de pesas en Bogotá, integró el cuerpo técnico de los seleccionados nacionales y fue miembro de la Cámara de Representantes de Colombia entre 2002 y 2010.

Pero no solo en fútbol. Ella además tiene en sus planes reforzar la inclusión de las mujeres no solo en la práctica deportiva, sino también en espacios como la dirección y la formación de nuevos talentos.

En el proyecto de talento y reserva deportiva intentará buscar en cada municipio del país el biotipo requerido para las múltiples disciplinas.

Urrutia deberá establecer unas auditorías a las obras del deporte, por lo que realizará una inspección relevante del estado de las licitadas y en proceso de licitar, examinará el presupuesto para la Dirección de Deporte, Recreación y Actividad Física y Escenarios junto con el Ministerio de Hacienda.

En los primeros 100 días del mandato de Petro está planeado radicar el proyecto de Ley del Sistema Nacional del Deporte. Urrutia ya se ha sentado con quienes diseñaron el proyecto para armar una política de estado que sea duradera y aprovechar lo realizado por el gobierno saliente. La nueva ministra espera poder estructurar de mejor manera los programas que acogen a las «viejas glorias del deporte colombiano».

Urrutia, quien también se destacó en el atletismo internacional en el lanzamiento del disco y la impulsión de la bala, no pierde de vista que para los Juegos Olímpicos de París 2024 quedan menos de dos años y tiene en agenda para los próximos días una conversación con el Comité Olímpico Colombiano.