París.- EL CAMPEONATO Mundial de Luchas vivió hoy su primera jornada de actividades, marcada por el arribo de delegaciones y la acreditación de atletas, entrenadores, personal médico, periodistas y voluntarios. Todo ocurrió con agilidad y normalidad, aunque con la presencia de un notable dispositivo de seguridad policial.
Desde horas de la mañana, en el Aeropuerto Internacional Charles de Gaulle, se divisaban los ómnibus del evento, escoltados en todos los casos por microbuses de la Policía Francesa "artillados" con cifras de entre cinco y seis agentes.
Al final de la tarde los alrededores de la sede de competencias, la Accord Arena del Distrito de Bercy, se mantenían acordonados con rejas de aluminio y custodiados por personal de seguridad, amable y dispuesto a colaborar en todo momento, pero al tanto de cada movimiento cercano.
En el interior de la espaciosa sala multipropósito la seguridad no era menor, pues cada área habilitada para el certamen y los corredores estaban también muy protegidos. Igual sucedía en el contiguo Novotel Bercy, una de las instalaciones de hospedaje más importante de la lid.
La razón de todas estas medidas tienen que ver con la ola de atentados terroristas sufridos por Europa en los últimos tiempos, alarma que se ha vuelto a encender tras los trágicos sucesos acaecidos hace pocas jornadas en Barcelona, España.
La capital francesa ha sentido en carne propia el dolor de la muerte, causada por explosiones, coches bomba, ametrallamientos y atropellos, como el de hace solo unos días en un suburbio de esta capital, donde fueron embestidos varios policías del servicio local.
El mundial reúne a más de 500 competidores y una cifra similar de otros participantes entre personal técnico, jueces, voluntarios, periodistas, etc. Por ello, el Comité Organizador y las autoridades de la urbe extreman las medidas para impedir cualquier eventualidad.
En cuanto al ambiente que se vive acá resalta no solo el diseño para la ocasión de la confortable Accord Arena, sino además los anuncios que se visualizan en varios puntos de la ciudad y en los canales de la televisión.
La Federación Francesa de Luchas y el Comité Olímpico Francés han coincidido en que esta cita es muy importante, como parte de la carrera por la sede de los Juegos del 2024, decisión que será tomada en septiembre venidero.
Muchos acá dan por hecho el triunfo en esa contienda, y la ciudad parece ya inmersa en las labores de rejuvenecimiento que exigirá acoger la mayor festividad atlética del planeta.
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