Río de Janeiro.- EN UN polémico final el cubano Reineris Salas (86 kilogramos) perdió la medalla de bronce frente al estadounidense Michael Tbory Cox J'den en el torneo masculino de lucha libre de los Juegos Olímpicos 2016.
El joven de 21 años aseguró ventaja antes de los tres minutos del primer tiempo 1-0 por penalidad al antillano, doble medallista de plata mundial (2013 y 2014), y décimo en la cita cuatrienal de Beijing 2008.
Sin embargo, penalizaron a Cox a unos cinco minutos del pleito y como no hubo acción de este en los últimos 30 segundos de esa ronda, se empató el encuentro, o sea una presunta victoria del antillano por haber marcado el último punto.
Reclaman los estadounidenses y favorecen a su representante con dos unidades, lo que le concedía ya prácticamente la victoria pues solo faltaban seis segundos para el pitazo final y privó a Salas de una de las medallas pronosticadas precompetenciapor el colectivo técnico .
Tras este triste desenlace, tanto el entrenador Julio Mendieta como Salas no disimularon su descontento, incluso el luchador dio por terminada su presentación y en evidente inconformidad se retiró del colchón.
Ninguno se sintió en condiciones de opinar a la prensa en la zona mixta, no obstante por razones profesionales insistimos y localizamos a directivos de la Federación Cubana, cuyas opiniones -sin intenciones parcializadas- justificaron la actitud de ambos al considerar injusta la decisión.
Recordaron que el árbitro silbó el final de los 30 segundos sin conceder puntos al estadounidense y sí uno al cubano, ya que su adversario no le marcó en ese lapso como estaba obligado a hacerlo por reglamento.
“Entonces viene la reclamación y los jueces consideraron que el norteño merecía dos puntos y uno para el cubano, o sea no se entiende cómo interpretaron la regla, si se considera un punto a Salas es que consideraron que en los 30 segundos no hubo acción válida de su oponente”, explicaron.
Agregaron que en ese caso los dos luchadores tienen que levantarse y continuar el pleito, pero no fue así y “realmente nos parece que los árbitros están seguros de que el fallo fuera el acertado”.
Una muestra adicional de este inesperado veredicto y tras la infructuosa reclamación de Cuba fueron las aclamaciones de los espectadores con sus rechiflas y apoyo a la molestia del atleta caribeño de 29 años de edad.
Salas llegó a la disputa del bronce al derrotar en la repesca 6-4 al boricua Jaime Yusept Espinal, subcampeón olímpico de Londres 2012, y luego del cubano ser arrastrado para el repechaje por el finalista turco Selim Yasar, quien lo había vencido 1-3 en su segundo choque del día.
Precisamente Yasar conquistó la plata de estos juegos, pues fue dominado 5-0 por el ruso Abdulrashid Sadulaev. El otro bronce correspondió a Sharif Sharifov (Azerbaiyán), quien se impuso al venezolano Pedro Ceballos 3-1.
Cuba hasta el momento ha logrado dos quintos escaños, ya que ayer con igual posición tuvo que conformarse Yowlys Bonne en los 57 kilos al caer por pegada contra el iraní Hassan Rahimi y así también perdió la posibilidad de escalar el podio.
Este domingo de cierre de los juegos toca salir al colchón de la sala Carioca 2 del Parque Olímpico a Alejandro Valdés (65) y Javier Cortina (97), quienes enfrentarán respectivamente al turco Mustafá Kaya y al estadounidense Frederick Snyder, este último ya en fase de octavos de final.
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