York, Toronto.- LA SANTIAGUERA Yudileyvis Castillo ama las distancias largas y luego de su paso por los XVII Juegos Panamericanos  parece haber cambiado decisiones que creía irrevocables.

Aquí enfrentó las agotadoras pruebas de cinco mil y 10 mil metros con apenas dos días de diferencia, y aunque se despidió sin metales los récords nacionales ahora llevan su nombre y eso compensó en algo el esfuerzo realizado.

Yudileyvis fue dos veces medallista de bronce en la cita centroamericana y del Caribe de Veracruz´14, no es integrante del equipo nacional de atletismo y desde hace 10 años reside en la ciudad de Santa Clara.

Quienes le vimos correr en esta urbe disfrutamos con su llegada como cuarta en los cinco kilómetros y verle atenta a la pizarra que anunció su registro de 15:54.44 minutos, tope para la isla.

Repitió el mérito cuando fue doble el trayecto enfrentado en medio de varias oponentes con rango internacional. Los 33:45.76 minutos consumidos entonces pudieron parecerle eternos en el que había idealizado como el último episodio de su carrera.

A los 31 años, 15 de ellos dedicados al deporte, creyó que el adiós sería lo mejor luego de esta cita, pero ahora percibe la situación de otra manera, según confesó a JIT al dialogar sobre ese y otros temas.

¿Cómo miras hacia lo sucedido?

Esto no me lo esperaba, así que llegaré a Santa Clara y veremos qué pasa, porque puede que siga. Le había dicho a mi entrenador que me retiraba después de estos juegos, pero acabo de romper los récords...

¿Complacida?

Para mí este evento ha sido lo mejor en cuanto a tiempos, pero no me voy feliz porque quería una medalla.

¿Cuánta entrega hay detrás de estas marcas?

Todo en el deporte es sacrificio, y para mí es un reto más grande aún. Paso mucho trabajo para entrenar, pero todo está en el esfuerzo que se haga, en el empeño que se ponga.

¿Qué sucede con tu preparación?

No siempre tengo todas las condiciones, aunque he recibido apoyo del comisionado Jorge Luis Sánchez, gracias a lo cual estuve dos meses en México, algo que contribuyó mucho a enfrentar este gran reto. Ahora supe superarme y creo que resultó un nuevo momento de mi carrera.

¿Por qué fondista?

No tengo idea, solo que desde que empecé en 800 metros se me hacía más fácil correr distancias largas. Es verdad que es muy extenuante, porque necesitas tener resistencia a la velocidad, a los ritmos que te exigen las contrarias, pero siempre se puede.

¿Cuánto corres en los períodos más agotadores?

En los días de volúmenes altos hago 30-33 kilómetros, pero siempre necesitas correr mucho, y aunque los entrenamientos te agotan debes seguir.

¿Qué fue lo más difícil ahora?

Lo di todo por una medalla en los 5 mil metros, y en el 10 mil me sentía sin fuerzas en las piernas, pero saqué de donde no había.

¿El futuro?

Esto es algo muy grande para mí, porque ni siquiera estoy en el mejor momento, por eso creo que Toronto me cambió los planes.