Viñales. - EL HABANERO José Miguel Rodríguez (Master B) se convirtió en el primer ganador de la carrera Mountain Bike Viñales 2022, que dio inicio este viernes en ese excepcional escenario del territorio pinareño.

En una hora, 44 minutos y 52 segundos negoció José Miguel el trayecto de 40 kilómetros por un itinerario en que los 41 participantes tuvieron que enfrentar elevaciones y desafiar peligrosos descensos entre montañas, maniguas y estrechísimos senderos.

A la meta, ubicada en la más alta colina del poblado de Viñales en La Ermita, bien cerca del hotel con igual nombre, llegó en solitario y casi con asombro pues representaba su primer triunfo en esta modalidad olímpica del ciclismo, del que no sabe todos sus secretos.

Detrás, otros que sí son especialistas en desafiar los abruptos parajes con extrema vegetación, arribaron a la raya de sentencia todavía con energía y entusiasmo para disputar un enardecido sprint.

Cruzaron en este orden el capitalino Fernando Pedroso (M-A), los espirituanos Anderson Montoya (Juvenil) y Álvaro Cardoso (M-A), y el también habanero Leandro Elizarde (Élite), todos con crono de 1:46.49 horas.

Once segundos después de ese lote cruzó la meta Marcos A. Rojas (Élite), delante de Joel López (1:51.42), Félix Medina (1:52.44) y Adrián Canet (1:52.56), todos provenientes de la capital.

El héroe varonil de la jornada, José Miguel, manifestó a JIT que «fue una maravillosa experiencia, no la tengo mucho en mountain bike, soy corredor de ruta, pero se disfruta al máximo, es una muy bonita familia la de este deporte».

Relató que el terreno resultó algo nuevo para él «un poco peligroso, pero si lo haces con cuidado todo es posible y así llegamos a la meta con buena forma. Realmente para mí lo más difícil fueron las bajadas, no tengo experiencia y son un poco complicadas».

«Este sábado en la etapa reina igual me cuidaré al máximo», manifestó sonriente al referirse a la segunda jornada, consistente en un corto tramo de 36 km, sin embargo requiere de los concursantes sus mejores habilidades técnicas para superar lo que impone una topografía montañoso en medio del monte.

La también capitalina Kelly Méndez, subcampeona del Challenger Escambray, en el inicio de esta competencia entró primera entre las damas, pero más que eso es de valorar de muy bueno su tiempo de 1:55.38 con lo que aseguró la plaza 13 entre los 39 que pudieron finalizar en este tramo.

«Una etapa bastante dura con muchos ascensos y dificultades técnicas, pero desde la salida intenté mantener una posición y un ritmo, que no me desgastara mucho porque este sábado es una jornada también muy exigente. Eso me permitió que pasado los 15 km pude avanzar con un ritmo cómodo», describió.

Calificó el recorrido de muy bueno, bien diseñado, pero muy riguroso, y contó que desde pequeña se vinculó a los deportes como atletismo y voleibol, aunque nunca pudo hacerlo como atleta de alto rendimiento. Hace dos años se vinculó al mountain bike y se enamoró de esta modalidad.

«Me ha permito conocer muchas personas que tienen diferentes formas de pensar, diferentes profesiones y convergen en un solo lugar por una sola pasión, el ciclismo, el amor al ciclismo y los retos», sentenció la favorita para ganar en Viñales.

Por su parte el corredor más joven del pelotón, Anderson Montoya, demostró que no por azar fue tercero de la etapa ante connotados rivales. Su participación en diversos eventos en diferentes provincias le ayuda a conseguir una sólida madurez competitiva y personal no obstante a sus 16 primaveras.

«La etapa desde el principio estaba dura, después no había tanto desnivel, pero al final se puso complicada, bajadas difíciles con troncos y raíces», señaló el muchacho de Cabaiguán.

Anderson, el novel “todoterrenos” que quiere llegar a ser el mejor de Cuba, envió un mensaje a los jóvenes cubanos. «Siempre que cuando puedan practiquen este deporte, es muy saludable y esta familia muy humilde, todos nos llevamos bien, manifestó el espirituano, quien aspira a llegar a ser el mejor de Cuba.