Cali.- LOS CUBANOS no pudieron conseguir en los Juegos Panamericanos Júnior los resultados que hubieran querido en la pista, pero les queda la agradable sensación de rodar sobre madera en ese “monstruo” de instalación que es el Velódromo Alcides Nieto Patiño, donde concluyen este lunes los eventos más cortos del ciclismo.

Para la mayoría de ellos se trata del debut a lo grande, y quienes tenían esa experiencia tampoco han vivido tanto la oportunidad de competir en una pista de 250 metros y elevados peraltes a los extremos, en que se requiere dominar bien la técnica sobre las bicicletas especiales de “piñones fijos” y tener otras habilidades imprescindibles para adquirir más velocidad y tener menos contratiempos.    

Daymelin Pérez, una pedalista del poblado de Buenaventura, en Holguín, se ha ganado un puesto en la preselección nacional y por primera vez puso “los pedales” en un velódromo. Y nada menos en el que ha sido sede de los más prestigiosos concursos del ciclismo mundial.

«Claro que impresiona, es que no se parece en nada al nuestro, se coge mucho impulso y la pista te bota, hay que tener técnica para correr aquí, me pareció muy lindo, pero hay que entrenarlo para poder correr bien», comentó a JIT.

«No obstante, me llevo la experiencia de correr por primera vez una Madison, junto a corredoras de tantos países, de ver el desarrollo del ciclismo, algunas llegamos, otras no, hay que entrenar mucho para poder llegar a ser grande», opinó.

Su coterránea Evelyn Díaz, del municipio cabecera de Holguín, es la compañera de Daymelin en esa carrera de relevo. En el velódromo de La Habana trataron de prepararse lo mejor posible rumbo a Cali.

No es la pista del Reinaldo Paseiro la ideal, ya está obsoleta por sus 333,33 metros y superficie de cemento, pero ha dado la posibilidad a muchos de entrenar y luego rendir, incluso ganar en competencias internacionales.  

«De este velódromo caleño me llevo una experiencia bonita, ya que fuimos las primeras holguineras y cubanas en venir a los Panamericanos Júnior. Realmente la pista al principio la sentí incómoda, luego fui cogiendo confianza en la carrera», relató mientras recorría con su mirada la elegante e imponente instalación.

Además de las situaciones por la covid-19, ellas tuvieron que entrenar solas la Madison, y al llegar a Cali se sentían incómodas con duplas de varias naciones dentro de la pista.

«Eso fue lo que pasó. En el momento que se cayó mi compañera no me dio tiempo a reaccionar y nos tardamos en reagruparnos», explica sobre pasajes del evento durante el cual, luego de unirse nuevamente, hubo otra caída. Todo eso les hizo perder tiempo y que los dúos punteros les dieran alcance en par de ocasiones y provocaran su descalificación, como la de otros cinco países.

«Estuvo muy compleja la carrera y hay nivel, por ello se debe entrenar más para en las próximas competencias obtener un buen resultado en eventos de este tipo. Sin embargo, debo decirle que no alcancé medallas esta vez, pero sí retorno a mi patria con la medalla de la dignidad», apuntó.

Por su parte, el habanero Dairon Ortega tampoco pudo avanzar en las pruebas de velocidad y keirin, las más cortas del ciclismo. De todas formas está contento de haber podido intervenir en este certamen para menores de 23 años, aunque igual le impresionó las características de un velódromo con todas las de la ley.

«Competir aquí me cambia totalmente el formato de lo que es correr porque no tiene nada que ver con la que tenemos en Cuba. Al tocar la pista por primera vez tienes que formatear todo desde el principio. Tuve muchos problemas técnico-tácticos, creo que demasiados. Eso es por la falta de competencias, pero espero que con más topes y en pistas como esta podamos algún día llegar a un buen nivel competitivo técnicamente», señaló.

«Obviamente no estoy satisfecho, esperaba más porque físicamente me siento en buenas condiciones. La pista y competir en la velocidad, una carrera muy táctica y yo no tenía ninguna, no me llevaron a mejores lugares», acotó.

Este martes será de descanso general en el ciclismo y traslado de los competidores de las pruebas de largo aliento hacia la localidad de Buga, donde tendrá lugar la contrarreloj individual femenina y masculina el primero de diciembre; la ruta para damas el día 2 y la de los caballeros el 3 en el cierre de esta disciplina. Cuba tendrá representantes en las tres carreras.