Tokio.- AUNQUE perdió en cuartos de final ante la francesa Madeleine Malonga, la cubana Kaliema Antomarchi enseñó la garra que se necesita en el deporte y todavía tiene opciones de medalla en los 78 kilogramos del torneo de judo de estos Juegos Olímpicos.
Una Kaliema que buscó todo el tiempo a su rival, que intentó acciones y no se dio nunca por vencida… así se mostró la caribeña en el tatami 2 del Nippon Budokan, donde enfrentaba a la doble medallista del mundo, oro en el 2019 en este mismo escenario y plata hace apenas unas semanas en Budapest, Hungría.
«Hice todo por la victoria, pero al final no pudo salir. Ahora me queda prepararme para el próximo enfrentamiento», dijo en la Zona Mixta, sitio al que llegó instantes después del revés y con lágrimas de impotencia ante lo sucedido.
«Fue un buen combate, en el que las dos estuvimos muy parejas y fue muy bueno sentir las vibras que me enviaban mis compañeros desde las gradas», comentó la santiaguera que debuta ahora bajo los cinco aros y tenía como rival a una mujer a la que nunca ha podido vencer.
«Ahora a prepararme para el próximo, todavía tengo posibilidades de medalla», se despidió de los periodistas, ya menos triste y segura de que es posible dar continuidad a la tradición de premios del judo cubano.
Malonga se anotó el triunfo en Regla de Oro utilizando una técnica de pierna para marcar el ippon y será contraria en semifinales de la sudcoreana Hyunji Yoon.
Kaliema irá en la repesca ante la neerlandesa Guusje Steenhuis, perdedora precisamente contra Yoon.
|