Tokio.- ESTRENARSE como abanderada de una delegación olímpica cubana despierta agradables sensaciones en la discóbola Yaimé Pérez, una de las favoritas para consagrarse en esta ciudad, a la que llegó hace pocas horas para comenzar el necesario proceso de adaptación previo a la competencia.

La campeona mundial de Doha 2019 inició sus entrenamientos en la ciudad de Tashikawa, unos 40 kilómetros al oeste de Tokio, y desde allí conversó con JIT sobre sus primeras impresiones de la sede y otros detalles de estas últimas semanas previas a la que quizá sea la competencia más importante de su vida.

«Creo que Cuba tenía otras atletas que también merecían ser la abanderada de la delegación, por eso es mayor el orgullo de que me hayan escogido a mí», dice “la Rusa” -así le dicen sus allegados-, santiaguera de 30 años que quiere dominar el Olimpo desde suelo nipón.

Yaimé compartirá con el judoca Mijaín López el privilegio de portar la enseña patria durante el desfile en la ceremonia inaugural del próximo viernes, que como el resto de las actividades aquí será a puerta cerrada para el público.

Respecto a sus últimas semanas de preparación junto a su entrenadora Hilda Elisa Ramos, la también monarca continental ratificó que buscaron mantener los niveles alcanzados en cuanto a estabilidad de los lanzamientos y el perfeccionamiento de los movimientos técnicos.

«Eso es lo que toca hacer en esta etapa en la que ya cubrimos un proceso completo para llegar aquí. Estoy muy motivada y mis expectativas son las mismas de siempre, salir a hacerlo lo mejor que sé», confesó tras la sesión matutina de preparación.

La final del lanzamiento del disco será el día 2 de agosto en el Estadio Olímpico, pero antes de llegar allí tendrá que asegurarse entre las 12 primeras mujeres durante la ronda de clasificación, fijada para el 31 de julio.

Cuba doblará su presencia en esta especialidad con la campeona mundial de Beijing 2015, Denia Caballero, sin marcas espectaculares en la temporada, pero con experiencia suficiente para crecerse en el momento álgido.

Ella y Yaimé enfrentarán a la croata Sandra Perkovic, quien defiende sus cetros de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016. En el ranking del año ocupan los puestos uno y dos la holandesa Jorine van Klinken (70.22 metros) y la estadounidense Valarie Allman (70.01).

Yaimé es tercera con 68.99 metros y Perkovic cuarta con 68.31. Denia no ha superado los 63 metros en la actual temporada, por lo que deberá emplearse a fondo para lograr un disparo que la ubique entre las ocho primeras.

En total, Yaimé cubrió siete competencias internacionales de preparación entre finales de mayo y principios de julio. Ganó cinco primeros lugares y dos segundos, y tuvo como registro máximo en esa gira un 67.90 metros firmado el 29 de junio en Castellón, España.

Lo mejor de su accionar en todas las presentaciones fue la estabilidad en los disparos, la mayoría por sobre los 64 metros y sin cometer faltas.

De cualquier manera, ahora todo comienza de cero. En su brazo descansa la oportunidad de acompañar con una corona el honor de ser la primera mujer que llevará una bandera cubana en la inauguración de unos juegos olímpicos.