Tokio.- CUANDO parecía que el astro cubano Andy Cruz no enfrentaría aquí al estadounidense Keyshawn Davis el atípico reparto de plazas empleado para el torneo boxístico de los XXXII Juegos Olímpicos terminó por favorecer otro posible duelo entre ellos.

El norteño había abandonado la ruta de los clasificatorios, pero la covid-19 impuso suspenderlos y los puntos acumulados antes le valieron para convertirse en uno de los tres profesionales enrolados por esa vía en el equipo que traerá su país a la capital nipona.

Andy le derrotó tres veces en combates finales del 2019: en la eliminatoria para los Juegos Panamericanos (3-2), en la propia justa de América, organizada en Lima (4-1), y en el Campeonato Mundial con sede en Ekaterimburgo.

Invicto desde que en abril de ese propio año los jueces le vieran perder en Francia ante el jerarca local Sofiane Oumiha, el doble rey universal y continental es considerado favorito para alzar el cetro en su debut bajo los cinco aros, y él trabaja duro para eso.

«Se trata del sueño de todo atleta, y el mío está a punto de poder hacerse realidad», ha dicho, convencido de que «la clave está en llegar bien preparado, porque entonces podemos hacer lo que orientan los entrenadores y resolver las situaciones que se presentan».

El norteño Davis se declaró «orgulloso de ser atleta olímpico» luego de una reinserción que parecía imposible al pasar al profesionalismo en medio de las incertidumbres desatadas por la pandemia, que terminó por llevarle nuevamente a filas.

«Esta oportunidad comenzó inexistente... y tiene un propósito que el tiempo revelará», aseveró quien comparte con el pluma Duke Ragan y el mediano Troy Isley la condición de primeros púgiles rentados presentes en una delegación olímpica estadounidense.

Un trío de dominios y las señales emitidas cuando aventajó en junio al mexicano excampeón mundial profesional Miguel “Títere” Vásquez en pleito a seis asaltos dicen mucho en favor de Andy, aun cuando Davis haya combatido más desde que se vieron en suelo ruso.

Pero que choquen o no sobre el ring olímpico dependerá de los caminos a recorrer por cada cual en una división donde el caribeño quizás encuentre opciones de desquite ante Oumiha, plata en Río 2016 y líder del mundo en 2017 como ligero.

El indio Manish Kaushik, bronceado del planeta, y el dominicano Leonel de los Santos, de reconocido ascenso, son otros que ocupan espacio en los comentarios especializados sobre la lid pactada del 24 de julio al 8 de agosto en la Arena Kokugikan.

Andy, que se entrega duro al gimnasio de la escuela nacional enclavada en La Habana, reconoce que es importante saber sobre los posibles rivales, pero prioriza estar centrado en el trabajo de cada día y no piensa en otra cosa que en la victoria.