ESTA Dinamarca no deja espacios para la indiferencia. Cuando ya pasó el susto de Eriksen todos se fijan en la capacidad de regresar después que todo parecía perdido.

La Dinamita Roja está en semifinales de la Eurocopa de Fútbol sin estridencias y jugando al fútbol de forma excelente. El arsenal de armas de esta selección la hace impredecible e implacable. 

Por aire llegó el ablandamiento a República Checa, comenzando la contienda. El bombardeo estuvo a cargo de Delaney, quien castigó en un córner que no era, sin marca en medio del desorden en el área de Vaclik, para anotar un gol que sí fue.

Dinamarca marcó primero y después lo mereció. República Checa respondía con verticalidad y juego frontal, pero el planteamiento rival le obligaba a poner en el terreno de operaciones más que algún torpedo solitario en medio del 3-4-3 que funciona como un reloj.

Antes del descanso llegó el discurso de Maehle, uno corto y conciso donde aseguraba que no hace falta ser zurdo para jugar por la izquierda. El del Atalanta fue breve para explicarlo, bastó un desborde y un centro a tres dedos envenenado para el remate de Dolberg, una joya. El gol todo valió por la asistencia. 

Los checos no dejaron de intentar en la segunda mitad, pero las oportunidades más claras se toparon con Schmeichel, menos la de Schick, quien hizo todo para alcanzar a Ronaldo en el liderato de goleo con cinco.

El partido tomó ritmo hacia el final, sobre todo porque los de Silhavy buscaban el empate y forzaban la ida y vuelta. Schick sufrió la maldición del goleador y como el resto de los principales artilleros de la Euro se despidió. Dinamarca pasó con el 2-1 ante un rival que se marchó con la frente alta.

Inglaterra ganó y otra vez con la puerta en cero, pero eso no es noticia. La buena nueva es que goleó incluso cuando Shevchenko metió tres centrales a la defensa ucraniana. 

La clave la tuvo Southgate, quien se enteró de que tiene un plantel con talento y metió a Mount y Sancho en el once inicial. Eso le dio libertad a Sterling para hacer estragos, como el pase filtrado a Kane para el primer gol apenas empezar el partido. 

Y si hablamos de libertadas están las de Shaw, quien primero asistió a Maguire a balón parado y luego al capitán para el segundo con la esférica en juego. Doblete del delantero y debacle ucraniana.

Antes del final llegó el gol de Henderson, de un córner, de cabeza y con historia. El centrocampista del Liverpool marcaba por primera vez en 62 apariciones con la selección. 

Inglaterra llega a las semifinales por segunda vez consecutiva en eurocopas y verá en casa a Dinamarca para decidir quiénes van a una final también en territorio británico.