La Habana.- ¿SABÍA usted que la reciente designación de sede para el Campeonato Mundial de Boxeo para hombres del 2021 convertirá a Belgrado en la primera ciudad que acoja par de veces esas lides?

Pero existe un añadido más peculiar: lo hará como capital de naciones diferentes.

La curiosidad responde a realidades geopolíticas, porque si en 1978 recibió la versión número dos de tales eventos como principal urbe de la República Federal Socialista de Yugoslavia, ahora ejerce esa condición en la República de Serbia.

Sirva ese detalle para repasar las estadísticas de lo acontecido hace 42 años allí, donde la escuadra cubana repitió la conquista de cinco cetros y el liderazgo por naciones disfrutado en la edición fundacional, organizada en La Habana.

Las reseñas de la época destacan que el gran Teófilo Stevenson (+81 kg) hizo abandonar en el asalto intermedio a Dragomir Vujkovic para sepultar las ilusiones de la afición local y reeditar la supremacía festejada junto a su ídolo Fidel Castro Ruz en 1974.

Jorge Hernández (48) acarició esa hazaña, pero el keniano Stephen Muchoki se le convirtió en pesadilla y alzó la corona tras llevarse veredicto de 4-1 en velada que también vivió los encumbramientos de Adolfo Horta (54), Ángel Herrera (57), José Gómez (75) y Sixto Soria (81).

Horta, Herrera y Soria igualmente acallaron al público anfitrión, al dejar en plata a Fazlija Sacirovic (3-2), Bratislav Ristic (4-1) y Tadija Kacar (4-1), respectivamente. Y el pegador Gómez frenó 5-0 al siempre combativo finés Tarmo Usivirta.

Además de Jorgito, hubo subtítulos para Héctor Ramírez (51), aventajado 1-4 por el polaco Henryk Srednicki, y Luis Felipe Martínez (71), quien cayó 2-3 a manos del soviético Viktor Savchenko.

Así quedó sellada la cosecha de la Isla (5-3-0), cualitativamente superior a la precedente (5-1-2) y válida para superar por dos títulos a la Unión Soviética, cuyo saldo dorado se completó con Valeriy Lvov (63,5) y Valeriy Rachkov (67).  

La otra subida al centro del podio la disfrutó el nigeriano Davidson Andehm, en una división de 60 kg en que el cubano Bienvenido Lazo perdió su tercera pelea.

Lo mismo le sucedió a Andrés Aldama en los 63,5, y en una menos quedó eliminado Emilio Correa en los 67.

Cuatro años más tarde la fiesta del pugilismo universal se celebraría en Múnich, y los alumnos de Alcides Sagarra repetirían el acceso a cinco preseas áureas, a las que agregaron una más de cada color.