La Habana.- EL REMERO cubano Ángel Fournier se entrena en casa por estos días, mientras cumple la cuarentena que impone el enfrentamiento a la COVID-19 a todas las personas recién llegadas del exterior.

Fournier realizó un provechoso entrenamiento de altura en México con miras a los ahora aplazados Juegos Olímpicos de Tokio.

«Allí todo marchó bien. La preparación se debía al Preolímpico en Brasil, pero no pudo ser», señaló el monarca en un par de remos cortos de los Juegos Panamericanos de Lima 2019.

«Estoy en la casa, ejercitándome en la mañana y la tarde, supervisado por mis dos entrenadoras personales: mi esposa Yusmary Mengana y mi hija Natalia, de dos años», dijo sonriente a JIT el guantanamero de casi dos metros de estatura.

«Estaré en esa rutina hasta que pase la pandemia del coronavirus. Cuando nos llamen regresaré a los entrenamientos en la Escuela Nacional José Smith Comas, nuestra segunda casa», señaló.

Respecto a la posposición de los Juegos Olímpicos de Tokio para el 2021 fue sencillo y directo: «Lo mejor que ha sucedido».

Fournier, quien va a sus cuartos juegos olímpicos, dijo sentirse bien de salud.

«Estuve tres meses bajo tratamiento médico a inicios del 2019, pero eso quedó atrás. Me encuentro en óptimas condiciones», reafirmó.

El capitán de los remeros cubanos compitió en el 4X de Beijing 2008, fue séptimo individual en Londres 2012 y sexto en Río de Janeiro 2016.