La Habana.- LA PISCINA olímpica del ahora llamado Complejo Recreativo Marcelo Salado quedó reinaugurada este sábado y se convertirá en un espacio ideal para revivir los deportes acuáticos en la zona oeste de la capital.

La emblemática instalación radicada en el municipio Playa, antes sede del equipo nacional de natación, fue remodelada por la Empresa Provincial de Círculos Sociales de La Habana y por convenio con el Inder tendrá una de sus piletas enteramente dedicada a la práctica de especialidades acuáticas.

Polo acuático, natación, natación artística, pentatlón y triatlón podrán practicarse aquí durante todo el año en turnos de martes a viernes desde la mañana hasta el final de la tarde, según adelantó Hermes Roberto Hasty, comisionado en la capital de los dos primeros deportes mencionados.

«Será un beneficio para estos deportes, que siempre han tenido mucha aceptación en esta zona de la ciudad y ahora se beneficiarán con una pileta en excelentes condiciones y que será mantenida por el Complejo Recreativo», comentó Hasty a la prensa.

Quienes entrenen en este sitio encontrarán facilidades para el trabajo, además de conocidos entrenadores, algunos que fueron protagonistas hace varias décadas en los propios equipos nacionales.

El Complejo, reparado en la segunda mitad del 2019 y que ya brinda servicios al público, cuenta además con otras dos piscinas recreativas, ranchón para servicios gastronómicos, discoteca, salón multipropósito, un parque infantil y un gimnasio biosaludable.

Eustaquio Pagés León, director de la mencionada empresa que asumió la reparación del sitio, aseguró que es un privilegio contar con un espacio deportivo dentro del recinto y adelantó que la idea es potenciar sobre todo el disfrute de las familias de la localidad.

«Estamos concibiendo funcionar como un proyecto comunitario, lograr que este sea un sitio para las familias sobre todo», enfatizó y mencionó con orgullo otros “rincones” en los que se podrá hacer deporte como las canchas de tenis y el terreno de baloncesto 3x3.

La tarea de cumplir las expectativas y mantener lo que este sábado se reinauguró corresponde ahora en especial a Yamilet Hierrezuelo, quien al frente de 160 trabajadores lidiará con las exigencias generadas en la instalación.

«Somos un centro que se autofinanciará y eso exige calidad para lograrlo, además de que queremos potenciar mucho la cultura cubana y tenemos varios proyectos para desarrollar», aseguró tras mostrarse satisfecha por ver animada la piscina olímpica.

«Parece otra cuando ya están nadando», comentó entusiasmada en más de una ocasión disfrutando de una obra a la que ha aportado y le tocará mantener en lo adelante.