La Habana.- CON EL Memorial Barrientos previsto para este fin de semana concluirá el proceso de selección que el atletismo cubano planificó para formar su equipo a los Juegos Panamericanos de Lima.

El evento, que volverá a ser internacional en esta ocasión, es el último medidor escogido sobre todo para las figuras más jóvenes, aquellas que quizás vayan a la cita continental con más opciones de desarrollo que como responsable principal en sus pruebas.

Así lo confirmó a JIT la comisionada nacional Yipsi Moreno, quien ratificó que el deporte rey en la Isla se ha trazado la estrategia de formar con solidez bases para el futuro, y para ello necesita desde ahora comenzar a probar en escenarios grandes a los que muestran potencialidades.

«Esperamos hasta el Barrientos para tratar de ser lo más justos posibles, para que cuando vayamos a elegir podamos demostrar con resultados», comentó acerca del sistema de selección que debe incluir una cifra cerca a los 45 implicados, e incluso puede dejar fuera a algunos con mascas mínimas ya completadas.

«Debe ser una de las delegaciones más pequeñas que hayamos tenido a Juegos Panamericanos, ya no es como antes que era solo con la marca era suficiente, ahora hay cuotas también. Tenemos el caso de Luis Enrique Zayas que tiene la marca de 2,25 metros pero son 16 y él está en el 18», ejemplificó sobre un detalle que varió respecto a Toronto 2015.

«Eso creo que como país nos ayuda, eso provoca que los atletas sean más realistas e interioricen el profesionalismo que deben tener», aceptó la campeona olímpica del martillo de Beijing 2008.

La reciente recordista nacional juvenil de la garrocha, Rosaidi Robles, es una de las tenidas en cuenta cuando de formar para el futuro se habla, lo mismo que otras del disco y el matillos femenino.

Del tema propósito general se confirmó que lo principal será lograr que cada uno de los involucrados se acerque lo más posible al entorno de sus mejores registros. En un deporte de tiempos y marcas como este ese es un parámetro fundamental, y se ha convertido en el hándicap de los últimos años.

Superar los cinco títulos de Toronto parece un reto demasiado exigente para un atletismo que enfrenta la nueva cita con déficit en algunas especialidades y que tiene en estos momentos solo tres pruebas en las que puede hablarse de oro “casi” seguro.

Los ejemplos en ese sentido son tres: el salto de longitud con Juan Miguel Echevarría, el disco con Denia Caballero –que defiende reinado– y Yaimé Pérez, y el heptatlón con Yorgelis Rodríguez, otra que irá por retener su hegemonía.

La pertiguista Yarisley Silva es otra de las campeonas hace cuatro años, pero la propia Yipsi reconoce que no transita por su mejor momento y es además una especialidad con mucha fuerza en el área actualmente.

El triple salto con Pedro Pablo Pichardo completó el quinteto dorado de la anterior edición, cuando también se cosecharon cuatro platas.