Santa Clara.- EL ESTADIO Natilla Jiménez viene a ser en esta ciudad el hermano menor del Augusto César Sandino. Quizás por su cercanía y las dimensiones típicas de las categorías infantiles se le conoce como “El Sandinito”. Allí comenzaron su camino, entre bolas y strikes, muchos de los atletas que han brillado con Villa Clara en series nacionales.

José Yadián Ganuza Pedraza entrena hoy a un gran número de pequeñines, quienes se inician en este deporte entre los cinco y ocho años de edad. Lleva más de tres lustros de experiencia como entrenador con muy buenos resultados. De su área salen dos selecciones para los campeonatos municipales de la categoría 7-8 años.

«En este curso las cosas nos han salido bien. Uno de nuestros equipos ganó el campeonato municipal y el provincial, con tres nocauts en la zona clasificatoria, otro a Cifuentes en semifinales, con pizarra de 17-0, y 27-2 a Camajuaní en la final», rememora.

Esta área mantiene excelentes resultados y logró promover a 13 atletas a la preselección del equipo Villa Clara. Un grupo de siete posee perspectivas inmediatas para la provincia. Sin embargo, la carencia de implementos deportivos en ocasiones dificulta el trabajo.

«Los implementos deportivos, la mayoría de las veces, los consiguen los padres. Nosotros hacemos la matrícula y trabajamos con lo que tenemos», agregó.

Ganuza atiende a los muchachos de lunes a viernes, y los sábados se realizan los concentrados municipales del área. Esa jornada se aprovecha para topar con otras provincias o municipios.

En el Sandinito se han formado peloteros con experiencia en eventos internacionales de las categorías inferiores, quienes incluso forman parte de la preselección nacional.

«Varios atletas empezaron conmigo en el área y hoy están en el equipo Villa Clara, como Mailon Tomás Alonso, Raidel Pedraza y Pablo Luis Guillén. Fui a torneos nacionales con Duvier Zamora, Julio Miranda y otros. Eso nos reconforta, que el fruto del trabajo se vea en la actualidad con esos jóvenes talentos», expresó.

José Yadián cree que los campeonatos provinciales tienen poca duración y eso lastra el trabajo en la base.

«El béisbol se desarrolla jugando, hay que aumentar la cantidad de partidos en las provinciales. Tenemos que levantar el béisbol desde estas categorías y eso se consigue con más juego. Los niños siempre lo agradecen», aseguró.

Algo interrumpe la conversación y se voltea para corregir posturas en el cajón de bateo. Le exige al bateador en turno que cambie la inclinación del codo y el pequeño responde con un jonrón.

Desde las gradas los padres aplauden y conversan entre ellos. Esperan el final del entrenamiento, cuando caen los últimos rayos del sol. Su filosofía de trabajo lo amerita…

«Siempre les digo a los padres que esto es como un aula, como una clase. Mi objetivo es enseñarlos a jugar béisbol. Después, llegar a ser grandes peloteros depende de ellos. Lo importante es que aprendan y se diviertan», sostiene.

En el estadio Natilla Jiménez o Sandinito, como lo conocen todos los santaclareños, siguen conectándose jonrones.

Entrenadores como José Yadián son héroes anónimos que impulsan desde la base el desarrollo de nuestro deporte nacional.