Santa Clara.- ANISLEY López ha sido la mejor lanzadora cubana durante la última década. La fornida softbolista de 33 años de edad, nacida en Manicaragua, municipio montañoso de Villa Clara, resulta prácticamente imbateable en los torneos nacionales. También ha mostrado su aterradora velocidad en escenarios internacionales.

Llegó muy joven al deporte de la bola blanda y todavía le quedan muchos ponches por recetar en una disciplina dada a la longevidad.

JIT quiso conocer detalles de su estelar carrera y los “lanzamientos” llegaron rápidos y en zona de strike, a pesar de la lesión que acaba de sacarla de la final de la lid doméstica con sede en esta ciudad.  

¿Cómo llegaste al softbol?

Practicaba baloncesto, pero vine al estadio a ver a una compañera que estaba en softbol. El entrenador del equipo me invitó a entrenar y ese mismo año, en 1998, asistí al campeonato nacional juvenil celebrado en Las Tunas.

¿Siempre lanzadora?

No. Comencé como tercera base y receptora, pero el profesor Ovidio Contreras me dijo que probara desde el box. Tiraba duro desde el comienzo, pero era muy regada. Ovidio me ayudó mucho con la mecánica de pitcheo. Luego he tenido varios entrenadores y todos han aportado un poco al mejoramiento de mis resultados.

¿Cuándo integraste el equipo Cuba?

Entré a la preselección nacional en el año 2005. Estuve en un clasificatorio en Guatemala y no pude asistir a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Cartagena de Indias 2006. A partir de ese momento he participado en todos los torneos internacionales en que ha estado Cuba.

¿Cuál ha sido tu mejor evento internacional?

Lo más grande ocurrió en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011, donde obtuvimos la medalla de bronce. Hacía años que no alcanzábamos un resultado de tanto nivel. Lancé el partido por esa medalla.

Háblame sobre tu experiencia en la Liga Italiana de Softbol…

Participé entre el 2014 y el 2017. Un entrenador cubano, Julio La Rosa, quiso llevarme para allá y lo consiguió. Jugué con el club Caserta. Obtuve buenos resultados y siempre estuve entre las dos mejores lanzadoras extranjeras de la liga. Mi efectividad se mantuvo por debajo de una carrera limpia por choque.

¿Qué diferencias existe entre ese torneo y el campeonato cubano?

La Liga Italiana es más fuerte porque los equipos se refuerzan con jugadoras norteamericanas y holandesas. Esas softbolistas levantan mucho el nivel.

¿Seguirás contratada en el exterior?

Eso espero. El año pasado estuve en una base de entrenamiento en Guatemala y lancé en el torneo local. Ahora tenía ofertas de otro club italiano, pero me decidí por la liga guatemalteca.

¿Cuáles han sido las bateadoras más complicadas a las que te has enfrentado?

Difíciles son todas. No puedes confiarte ante ninguna. No digo nombres porque todas son iguales. En Italia me enfrenté a estadounidenses de gran contacto y muy buena zona de bateo.

Muchas se aterran con tu velocidad… ¿Cuánto te han marcado?

He tirado 74 millas. Este año en Guatemala mantuve las rectas sostenidas entre 70 y 73. En el torneo nacional no estoy a esa velocidad por una lesión en el tobillo, pero pudiera llegar en el transcurso de la competencia.

¿Cómo estás desde el punto de vista físico?

Me siento en buenas condiciones físicas, salvo esta lesión ahora. Todavía queda Anisley para rato, aunque tengo que bajar un poco de peso. Eso me golpea. La velocidad se mantiene bien y me quedan muchos lanzamientos por tirar.

Dime de las posibilidades de Cuba en el clasificatorio olímpico…

Confío en el equipo que irá a ese torneo. Todo lo que uno se propone en la vida puede lograrse. Si queremos podemos llegar a Tokio. Entrenaremos con deseos para ganar ese Preolímpico.