Ciudad de Panamá.- VARIAS notas interesantes ha dejado esta edición de la Serie del Caribe de Béisbol que acoge el país canalero como bateador emergente.

La camaradería entre los colegas de la prensa ha caracterizado el evento. Los periodistas de otros países nos solicitan información sobre los Leñadores de Las Tunas, y nosotros los complacemos hasta donde podemos. Siempre hemos tenido un brazo dispuesto a ayudarnos.

En el partido entre Leñadores y Cardenales de Lara, un foul golpeó en la cabeza a un niño. Al finalizar el duelo lo vimos vendado, y con varias pelotas para que le firmaran los protagonistas. Por suerte solo fue un susto.

Nuestro fotógrafo descubrió en las gradas a una pareja de un cubano con una venezolana disfrutando el partido entre la selección cubana y la vinotinta. Rivales solo en el terreno.

La prensa cubana en este torneo está conformada por varios novatos, aunque hay bateadores bien experimentados como Joel García, del periódico Trabajadores, y Yasiel Cancio de Prensa Latina. El más veterano de todos es Ventura de Jesús, el enviado especial de Granma, aunque también se estrena en estas lides beisboleras.

Varios cubanos alientan desde las gradas a los Leñadores. Las banderas de la estrella solitaria también tienen protagonismo en el estadio Rod Carew.

A pesar del buen resultado de los Toros de Herrera de Panamá, quienes han conseguido dos victorias, no hay muchas alusiones al evento en la ciudad debido a la premura que tuvo la organización.

El precio de las entradas ha sido bastante asequible, pero la asistencia de público es pobre sobre todo en los partidos vespertinos. La emergencia atentó contra la presencia de más fanáticos.

La tarde ha sido nefasta para los bateadores. En los partidos celebrados a las 3 pm solo se han anotado 22 carreras en cinco juegos. El viento del Rod Carew también ha sido protagonista.

No solo Mariano Rivera le ha brindado brillo a este torneo con su presencia. Otro reconocido lanzador panameño como Bruce Chen, con una carrera de 17 años en Grandes Ligas y balance de 82-81, se encuentra aquí para apoyar al equipo de su país.

Lo más importante es que esta ciudad salvó la cita y le puso sus matices.