Las Tunas.- DARIEL Góngora se ratificó como uno de los mejores lanzadores de Las Tunas en la 58 Serie Nacional de Béisbol. El agramontino ha sido un baluarte en la rotación abridora de los Leñadores.

Con el traje de Camagüey en la primera fase terminó con balance de 6-4, apenas le batearon para 269 y su efectividad fue de 3,74. Estos números lo llevaron a ser solicitado como refuerzo por el equipo de Las Tunas.

Tuvo una fenomenal segunda etapa con los Leñadores, con seis victorias y una sola derrota. Le batearon 276 con un promedio de carreras limpias de 3,07 y un WHIP de 1,28.

Por si fuera poco, el zurdo camagüeyano finalizó en la 58 Serie Nacional de Béisbol como líder en victorias con 12 y en juegos completos con cinco.

«Le debo este notable salto de calidad a mi familia, que me ha apoyado mucho. También a los entrenadores de Camagüey y de Las Tunas, quienes han trabajado fuerte conmigo», declaró después del segundo partido de la final.

Góngora se ve muy seguro desde la lomita y suma dos éxitos en los play off de la actual temporada, ante Ciego de Ávila y Villa Clara, respectivamente.

«Me enfoco mucho en los entrenamientos. Eso es muy importante para el lanzador. Mi estatura es pequeña y como tengo poca masa corporal entreno al máximo para tener buenos resultados. A todo eso le sumo la incorporación de un cambio de velocidad que me ayuda en momentos difíciles del juego», afirmó.

Este año ha sido una pesadilla para Villa Clara, al punto de que estableció una marca de seis victorias contra el mismo equipo en una campaña.

«Villa Clara es un gran equipo. Me ha tocado ganarle seis veces este año, pero ningún juego se parece a otro. Nunca menosprecio a ningún conjunto. Las victorias simplemente han salido y estoy muy feliz con este segundo triunfo en la final», apuntó.

Dariel Góngora ha sido una pieza fundamental para Las Tunas, conjunto que busca su primera corona en series nacionales.

«Este equipo es una familia. Somos como hermanos. Todo el mundo se apoya aunque estemos debajo en el marcador. En esa unión está la clave del éxito. No doy pronósticos porque para ser campeones hay que ganar cuatro juegos, pero tengo la certeza de que haremos historia», aseguró.

Temporada de récord, lideratos y madurez deportiva pudieran llevar al lanzador camagüeyano a una selección nacional. Ha hecho méritos suficientes para enfundarse la casa del equipo Cuba.