Santiago de Chile.- EL CUARTO lugar en el relevo 4x200 metros estilo libre justificó hoy la celebración de la cuarteta cubana durante la penúltima jornada de la natación en los XIX Juegos Panamericanos.

El plan de cierre contempló un movimiento con respecto a la formación que nadó la eliminatoria matutina, pues Andrea Becali se encargó del tramo inicial y rindió frutos. 

De 8:19.77 minutos en la primera incursión se pasó a 8:11.03, lo que permitió ganarle el pulso a las mexicanas y escoltar a las postas presentadas por Estados Unidos, Brasil y Canadá, las tres potencias del continente.

«Queríamos que no nos sacaran tanta diferencia desde el principio», explicó Becali sobre el planteamiento de la entrenadora Luisa María Mojarrieta, consciente de la excelente forma mostrada por la joven capitalina en este certamen.

«Nos sentimos orgullosas por estar entre las mejores del continente. Lástima que no haya salido el récord nacional», agregó la también finalista en las pruebas individuales de 100 y 200 metros libres celebradas antes en el Centro Acuático de Ñuñoa.

«Realmente estamos contentas porque sabemos que dimos todo. La preparación fue un poco complicada y estuve entre las más afectadas», reconoció Elisbet Gámez, líder del elenco que completaron Laurent Estrada y Lorena González.

La baracoense, encargada del cierre en los relevos, afrontó algunos contratiempos durante la beca de preparación en Francia, algo que terminó lastrando aquí su rendimiento. A pesar de sus enormes ganas, mostró una forma diferente a la exhibida durante los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023.

Teniendo en cuenta el nivel que la separa de las naciones de la élite continental, la posta cubana se había trazado como meta superar a las mexicanas, que las relegaron al quinto escaño en el 4x100 metros estilo libre, aunque entonces firmaron una plusmarca nacional de 3:44.97 minutos.

Ese objetivo se cumplió con creces, pues resultó notable la distancia sacada al relevo de las aztecas, que cubrió el trayecto en 8:23.56 minutos.

Los registros de vanguardia no dejaron margen a las sorpresas. Las cuartetas medallistas se enfrascaron en un reñida confrontación decidida en el segmento final a  favor de las estadounidenses, por momentos cerca de quebrar el récord panamericano. Finalmente estamparon 7:55.26 minutos gracias a la remontada de su estrella Paige Madden.

La subtitular olímpica y mundial redobló la fuerza de sus brazadas para superar a Gabrielle Roncatto, a quien no le alcanzó el notable apoyo en el graderío. En definitiva, las sudamericanas cerraron segundas con marca de 7:55.85 minutos, ligeramente mejor que el 7:56.98 que garantizó a las canadienses el metal bronceado.

Cuando apenas resta una jornada para el cierre de la natación, con seis finales en el programa, Estados Unidos aparece como indiscutible ganador de ese deporte. A su cuenta aparecen de momento 17 títulos entre sus 40 premios, a solo uno del botín conseguido en la edición de Lima 2019.