Lima.- ARLETTYS de la Caridad Acosta sigue en plan de “aparecida”. Si hace un año logró un oro impensado en los Juegos Centrocaribes de Barranquilla, hoy se anotó en el medallero de los Panamericanos sin todavía cumplir los 20 años de edad.
Podía esperarse más, por su calidad, temperamento y compromiso, pero su bronce en los 67 kg colmó las espectativas de un equipo que se empeñó en tocar la gloria continental, pero no lo logró por segunda vez desde que las chicas debutaran en Mar del Plata 1995.
La villaclareña inició con éxito por superioridad sobre la tica Katherine Alvarado, y luego pasó 5-1 sobre la mexicana Victoria Heredia. Entonces, en semifinales, no pudo superar (5-10) a la estelar brasileña Milena Titoneli, bronce mundial hace apenas unas semanas en Birmingham.
Por el bronce afrontó una batalla campal ante la argentina Alexis D. Arnolt, en la cual llegó perdiendo 5-7 al último período. Sin embargo, “robándose” la iniciativa en el final consiguió un par de patadas a la cabeza y marcador decisivo de 10-7.
Justo al sonar el silbato, Acosta dejó caer el torso sobre sus piernas y se regaló unos segundos de descanso y callada celebración. Solo después saludó al público y a su entrenador.
Entre sollozos habló con la prensa sobre la medalla número 18 de las mujeres cubanas (5-4-9) en estas citas. Todo ocurrió en el “congelado” Polideportivo 1 del Callao, en las afueras de Lima.
«Un privilegio participar en estos Juegos y ganar esta medalla de bronce. Quería la de oro, pero no se pudo. Ahora seguiré entrenando para buscar un premio en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020», fueron sus primeras impresiones.
Luego aceptó decir que «mis metas están más allá de lo que obtuve en Barranquilla 2018. Seguiré dando lo mejor para Cuba y mi familia».
Al comentar el combate semifinal ante la Titoneli expresó: «Fue bastante dura, habíamos peleado en República Dominicana una vez. Es una atleta súper grande, se preparó bien, como yo, pero no pude derrotarle. En el último asalto se vio superior, así que nada, hay que seguir adelante».
Sus últimas palabras fueron de agradecimiento: «Pienso en mi familia, gracias a la cual estoy aquí, y en el pueblo cubano y mis entrenadores. Síganme que Arlettys va a continuar dando lo mejor para Cuba».
La otra cubana en competencia hoy, Yamitsi Carbonell, terminó quinta en más de 67 kg.
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