La Habana.- DOS medallas de oro y una de plata fue el excelente cierre puesto por los cubanos Manrique Larduet y Randy Lerú a la Copa del Mundo de gimnasia artística de Guimaraes, en Portugal, una justa que les marcó el retorno a la primer nivel luego de casi un año de ausencia.

Manrique, quien había ganado ayer el título en las anillas, dominó este domingo el caballo de salto y las barras paralelas, en tanto su compañero Lerú fue segundo en una barra fija en la que se coronó el húngaro David Vecsernyes por apenas 0,50 décimas de diferencia.

«Es bueno terminar así. Este es más el nivel de ellos, no lo que sucedió en las clasificaciones cuando enfrentaron la competencia muy cansados por el viaje», reconoció desde la sede el entrenador Carlos Gil, que elogió sobre todo las notas recibidas hoy.

El subtitular del all around del 2015 dominó el salto con 14,675 puntos por delante del guatemalteco Jorge Vega (14,575), quien será uno de los rivales incómodos en los muy cercanos Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla.

En las paralelas se subió a lo más alto del podio luego de recibir 15,100 unidades y dejar detrás –por mucha diferencia- al rumano Andrei Vasile Munteun (14,600) y al suizo Henji Mboyo (14,350).

A estos oros el mejor gimnasta cubano de la actualidad sumó la víspera el de anillas y los lugares seis y siete en manos libres y caballo con arzones, en ese orden.

El único aparato que escapó de su presencia en la discusión de los metales fue la barra fija, pues no pudo quedar el segundo día entre los ocho primeros.

«Estamos contentos con lo que hemos hecho aquí, incluso en algunos casos bajamos la complejidad de las selecciones», ratificó Carlos, y adelantó que en los pocos días que restan para Barranquilla se dedicará a trabajar en detalles detectados ahora.

Cuba estará en la cita regional con equipos completos en uno y otro sexo, y buscará un aporte importante de oros para contribuir al objetivo de la delegación de mantener el primer lugar por países.