La Habana.- DISCRETOS resultados en pértiga y salto triple dejó hoy para Cuba la segunda jornada del Campeonato Mundial de atletismo bajo techo, marcada por tres récords en la Arena Birmingham.

Una Yarisley Silva lejos de su acostumbrada buena forma apenas sobrepasó los 4,60 metros y terminó séptima en evento convertido en atracción por la enconada lucha entre la estadounidense Sandi Morris y la rusa Anzhelika Sidorova, que compite bajo bandera neutral.

La caribeña, reina en Sopot 2014, comenzó en 4,35 metros pasados de primera intención, falló luego una vez en 4,50 y venció los 4,60 sin errores. Los 4,70 le resultaron demasiado esquivos en los tres intentos.

Definitivamente este era el día para la Morris, quien llevó a 4,95 metros el registro máximo para estos campeonatos, e incluso intentó sin éxito los 5,04 que hubiera inscrito como cota universal.

El registro firmado ahora le permitió, además, igualar su propia marca personal del 2016, que es también lo cimero de todos los tiempos en salas techadas.

Sidorova celebró lo mejor de su vida con 4,90 metros y se llevó la plata, en tanto la principal favorita, la griega Ekaterine Stefanidi, debió conformarse con bronce de 4,80.

Ella dominó las principales justas desde el 2016, y esta noche inició la competencia cuando ya la varilla marcaba 4,70 metros, pero no mostró la seguridad de otras ocasiones y pronto quedó claro que no sería la heredera del cetro ganado por la estadounidense Jennifer Surh en Portland 2016.

En el triple estaban centradas las otras esperanzas de la afición cubana, pero tampoco ahí hubo nada que festejar luego de que Cristian Nápoles se despidiera noveno con 16,70 metros y Andy Díaz fuera décimo quinto con discretos 15,37.

Este último había enfrentado molestias en las pasadas semanas y su presentación estaba acompañada de una incógnita, pero de Cristian muchos pensaron que podía sorprender con más de 17 metros, marca que habitualmente supera al aire libre.

En definitiva fue el estadounidense Will Claye, medallista olímpico y del planeta, el dueño del cetro con 17,43 metros que son lo máximo del año.

El brasileño Almir Dos Santos fue plateado con 17,41 y el veterano portugués Nelson Évora bronceado con 17,40 inscritos como récord para su país.

Los estadounidenses Christian Coleman y Kendra Harrison acompañaron sus títulos de nuevos registros para el campeonato. Él con 6.37 segundos en los 60 metros planos y ella luego de 7.70 en los 60 con vallas.

La “andanada” de cotas la completó en la impulsión de la bala el neozelandés Thomas Walsh gracias a 22,31 metros.

Mañana quedará la última opción para los cubanos con Roger Valentín Iribarne, asegurado desde este sábado para las semifinales de los 60 metros con vallas.

Fue segundo del heat dos con 7,59 segundos, el cuarto mejor tiempo entre los 37 competidores.