La Habana.- CON la encomienda de entrevistar al presidente del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder), Antonio Becali, sobre la segunda etapa de rehabilitación de las instalaciones deportivas creadas para los Juegos Panamericanos de La Habana 1991, me fui el pasado lunes hasta la Escuela Nacional de Vela, en Jaimanitas.

Llegué una hora antes de lo previsto, con la idea de gestionar la información, pero no fue posible. «Abordaremos ese tema en el encuentro mensual con la prensa deportiva», dijo amablemente el Doctor en Ciencias Antonio Becali Garrido.

Entonces hablemos de pelota, de cómo ve la recién iniciada 57 Serie Nacional de Béisbol, le propuse y aceptó.

«Hay muchas expectativas. Equipos que son insignias han comenzado por la senda triunfante, lo que le da un incentivo muy particular.

Que hoy Pinar del Río haya cogido el paso que tiene (va en la primera posición), que en el Guillermón Moncada se dé el clásico de la pelota cubana: Industriales-Santiago y que sea grande la afición en el estadio santiaguero, nos permiten presagiar una Serie Nacional muy positiva, y más importante, que el pueblo la disfrute.

¿Qué peculiaridades distinguiría en el béisbol?

El béisbol tiene singularidades. No es lo mismo jugar en la receptoría que en otra posición. El receptor tiene que ser un hombre con mucha inteligencia, porque es quien arma el juego, quien dirige el pitcheo (Frank Camilo es un ejemplo y es además sumamente defensivo). Cada posición tiene sus características propias, y también el somatotipo influye a la hora de jugar una u otra.

¿Usted jugó pelota?

Mi pasión, mi vida, es el judo —es cinta blanca y roja 7mo. Dan, alta calificación que otorga la Federación Internacional de Judo a personalidades reconocidas—; pero la pelota me encanta. Como todos, de muchacho jugué pelota. Ya en el Fajardo (Universidad de las Ciencias de la Cultura Física y el Deporte Comandante Manuel Fajardo), jugué la primera base y fui bateador designado, turno que “me gané” por ser el rector.

El Inder está inmerso en un proceso de reparación y mejoramiento de instalaciones deportivas. ¿Llegará también a las del béisbol?

Hoy el Estadio Latinoamericano está remozado. Los club house están al nivel de cualquier estadio del mundo y la mitad del techo es nueva. Hubo que parar las labores por el comienzo de la Serie, pero vamos a terminar de techarlo. En el Latino pronto vamos a tener una sorpresa y al pueblo le encantará.

En cada una de las provincias se ha invertido en el mejoramiento de los estadios, sobre todo en los de las cabeceras; pero todavía hay muchos en los municipios que deben rescatarse. La pelota es identidad, cultura, pasión y llevar un espectáculo como este a un municipio se convierte en un acontecimiento para los habitantes de ese pueblo, por lo que hemos pedido a las autoridades que eleven el nivel de esos estadios para que la Serie Nacional pueda llevarse hasta allí.

La calidad y disponibilidad del calzado y vestuario de nuestros atletas también mejorarán…

En la segunda fase de la Serie queremos darle un mejor espectáculo al pueblo, más colorido. Habrá cambios en cuanto al vestuario de los peloteros.

A propósito, por los de qué color se inclina, por los azules, los naranjas, los verdes…

Mi equipo es Cuba.