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La Habana.- CUBANOS despedidos sin premios, una polémica en la jabalina y reinados de Sandra Perkovic en el disco y Christian Taylor en el triple fueron noticias hoy en el Gran Prix de atletismo Sainsburys de Birmingham, quinta fase de la Liga del Diamante.

Lo más llamativo del discreto accionar de la isla fue el sexto lugar de Yarisley Silva con apenas 4,42 metros en una pértiga dominada por la brasileña campeona mundial del 2011 Fabiana Murer, elevada ahora hasta los 4,72.

Yarisley, bronceada en Shanghai durante la segunda parada del circuito, anda claramente fuera de su mejor forma y aunque los entendidos insisten en que sus índices técnicos están bien para la etapa, comienza a preocupar.

La plateada olímpica de Londres es habitualmente muy competitiva y sus seguidores admiran la manera de encarar los retos, lo cual hace que se extrañen al verla con registros tan discretos.

El segundo y tercer puestos se los repartieron la estadounidense Mary Saxer y la rusa Anzhelika Sidorova, dueñas de idénticos 4,62.

La otra presencia cubana ocurrió en el triple salto de hombres con el jovencito Lázaro Martínez quedado quinto con 16,48 metros en jornada de éxito para un Taylor que marcó 17,40.

El rey olímpico triunfa por tercera vez consecutiva en la urbe británica y se mostró consistente con cinco saltos válidos por sobre los 17 metros, pero no pudo acercarse a los 18,04 registrados hace tres semanas en Doha.

Desde aquella ocasión quedó planteada la disputa entre él y el cubano Pedro Pablo Pichardo, ausente esta vez y líder con ocho puntos en el ranking del diamante.

El francés Benjamín Compaoré se apoderó del segundo puesto con 17,01, por delante del nigeriano Tosin Oke, llegado a  16,71.

Conflictivo se convirtió el evento de jabalina entre hombres con el keniano Julius Yego, el trinitario monarca olímpico Keshorn Walcott y el checo rey mundial Vitezslav Vesely como protagonistas.

Sucede que estuvieron pasándose de mano en mano el vanguardismo de la lid hasta que Vesely tiró en su último intento 88,18 metros que parecían definitorios, pero Yego vino a desmentirlo.

Envió el dardo claramente más lejos, pero en una zona carente de las líneas que delimitan los bordes del terreno válido, y provocó la desestimación de los jueces.

La medida oficial fue 91,39 metros y la decisión anuniada por los neutrales suscitó la protesta. Esta se revocó minutos después para declarar ganador a Yego, desde ahora recordista africano y de la liga.

Vesely fue segundo y Walcott le escoltó con 86,43.

En el disco la inmensa croata Perkovic tiró 69,23 metros en su primer intento y rompió el registro de la reunión, que era de 66,16 desde el 2002.   

«Estoy feliz de que todo salió como estaba previsto. Un estadio como este se merece ver una distancia como la que se produjo hoy», dijo la dueña indiscutible de la especialidad.

«Mi objetivo para esta temporada es el mundial de Beijing, quiero defender mi título de Moscú, todavía tengo otras cuatro reuniones del diamante y quiero ganarlas todas», adelantó en el sitio web de la Federación Internacional