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La Habana.- MARITZA Arribas aportó hoy el triunfo necesitado por las cubanas para mantenerse invictas en tres rondas de la Olimpiada Mundial de ajedrez con sede en Tromso, Noruega, y ascender hasta el octavo puesto de una clasificación sorpresivamente liderada por Irán.

Estrenada frente al cuarto tablero la multicampeona de la isla aprovechó la conducción de figuras blancas para derrotar sin sombra de complicaciones a Ivona Purgar (2 102), la jugadora menos ranqueada entre las alineadas por una Croacia que parecía destinada a sucumbir más fácilmente que 1,5-2,5.

Maritza (2 291) se impuso en 66 jugadas de una apertura Inglesa para restar tensión a su compañera Yaniet Marrero (2 324), que entonces aún se las veía ante la segunda mesa con Borka Franciskovic (2 318) en duelo terminado en paz después de 75 movidas de una defensa Caro Kann.

«Pensamos que ganaba, porque llegó a tener clara ventaja, pero no pudo concretarla en un final de torres y dama muy cerrado», dijeron en La Habana especialistas encargados de seguir los cotejos para apoyar en los análisis y la proyección de la estrategia.

Antes habían concluido por igual vía Lisandra Ordaz (2 345) y Sulennis Piña (2 270), rivales de Valentina Gobulenko (2 269) y Zrinka Deur Saric (2 113) en las mesas primera y tercera, por ese orden.

Luego de tres fechas solo 12 de los 136 equipos concursantes lograron éxitos consecutivos y comandan el ordenamiento con seis unidades cada uno, aunque por desempate las iraníes son las mejor situadas, con China y Armenia detrás.

Irán venció este lunes 4-0 a Bosnia mientras China se quedaba con un 3-1 frente a Estados Unidos y Armenia le imitaba a costa de Vietnam.

Mañana las cubanas tendrán un dificilísimo enfrentamiento ante Hungría, otra nómina que no sabe de derrotas y se sitúa séptima en la clasificación.

Los hombres de la isla no pudieron concretar un triunfo esperado por sus seguidores y pactaron paridad de 2-2 a base de cuatro empates con un Polonia que contó con exponentes conocidos.

El más encumbrado de ellos fue Radoslaw Wojtaszek (2 735), conductor de figuras claras frente a Leinier Domínguez (2 760) en un primer puesto donde llevó cierta iniciativa durante la mayor parte de la acción.

«Fue una partida complicada, algo mejor para el polaco, pero Leinier estuvo muy preciso en la defensa», comentaron los expertos reunidos en el llamado “puesto de mando” local.

Con división de honores se dieron igualmente las manos Lázaro Bruzón (2 664) y Jan-Krzysztof Duda (2 576), Yuniesky Quesada (2 649) y Mateusz Bartel (2 640) e Isam Ortiz (2 603) y Bartosz Socko (2 612).

Lo sucedido pesó en la situación de los caribeños, antes autores de par de triunfos y ahora enviados al escaño 17, que tratarán de abandonar cuando rivalicen con India, ocupante del 16 con similares cinco rayas.

Francia, ganador 2,5-1,5 ante Armenia, completó seis rayas y se apoderó de la cima por mejor coeficiente de desempate que Serbia y Rusia, vencedores de Islandia y Moldavia, respectivamente, y también apoderados de un sexteto de puntos.