La Habana.- LA FAMILIA del ajedrez y el Movimiento Deportivo Cubano amanecieron este martes con una triste noticia: falleció una de sus más conocidas figuras, el Gran Maestro Román Hernández Onna, a la edad de 71 años.
Nacido en Santiago de Cuba en noviembre de 1949, Román fue uno de los hombres que en la década de los años 70 del pasado siglo convirtió en realidad el pensamiento del Che, cuando adelantó que Cuba graduaría a muchos grandes maestros.
Participante en ocho olimpiadas mundiales, campeón nacional en 1982 y ganador de otros certámenes dentro y fuera de la Isla, será recordado por su carácter amable y su poco hablar. Entrenador de jóvenes prospectos, era descrito como un conocedor del ajedrez y de extensa cultura general.
Se graduó de Maestro Internacional en 1974, luego de completar sus normas de manera convincente en lides de Bulgaria y Yugoslavia. Apenas tres años después recibió el grado más alto que otorga la Federación Internacional de Ajedrez, cuando cumplió los requisitos para GM en España y Colombia.
Con título de Entrenador Fide desde 2014, luchó por su vida la partida más importante. Desde hace varios años enfrentaba una enfermedad degenerativa que se agravó con problemas respiratorios en las últimas horas.
Su huella quedará para siempre entre quienes eligen el ajedrez como profesión y pasión. Llegue a sus familiares y amigos las condolencias del Movimiento Deportivo Cubano, y en especial de quienes fueron sus compañeros durante tantos años dedicados al Juegos Ciencia en la Isla.
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