Santiago de Cuba.- LA SABIDURÍA martiana nos legó la máxima de que «la muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida».

Esa idea cobra fuerza ante el fallecimiento hoy de Higinio Vélez Carrión, titular de la Federación Cubana de Beisbol.

El destacado mánager de equipos santiagueros y nacionales batalló semanas contra las complicaciones derivadas de la covid-19, las cuales terminaron causando su muerte pese a los esfuerzos de los especialistas del hospital habanero Doctor Luis Díaz Soto.

Ante la consternación de la familia del deporte y el pueblo cubano en general, JIT conversó con algunos de sus compañeros y pupilos.

«No compartí con él como atleta y tampoco tuve la suerte de que me dirigiera. Incluso cuando tuve resultados importantes, tanto en Cuba como en eventos internacionales, hubiera sido enriquecedor formar parte de aquellos equipos que él educó y que tanta gloria le dieron a Santiago y al país”, expresó Braudilio Vinent Serrano, a quien muchos expertos catalogan como el mejor pítcher de nuestras series nacionales.

El icónico Meteoro de la Maya agregó: «Higinio era todo humildad, y a pesar de sus sólidos conocimientos beisboleros, recuerdo con orgullo como se me acercaba y pedía consejos para que talentos del momento como Vera, Ormari, Cintra y Danny Betancourt crecieran como deportistas».

Yamil Ahuar Fondín, comisionado provincial del deporte de las bolas y los strikes en este suroriental territorio, señaló: «Fue un entrenador cabal, pero ante todo un revolucionario ejemplar. No aspiraba a nombramientos y si les eran otorgados era por su entrega total a nuestro deporte. La pelota en Santiago le debe muchas alegrías a ese grande que hoy despedimos, pero su legado está y estará más presente en todos los estadios de la nación».

El actual presidente de la Peña Deportiva Faro y Guía, Jorge Campos Miguel, también manifestó su pesar: «Quién no recuerda a la gloriosa Aplanadora Santiaguera, liderada en su primera versión por Higinio. Incluso los que no son seguidores de las Avispas, conocen los logros deportivos de esos peloteros irrepetibles, y añoraban ver a Vélez, aparentemente sereno, pero consumido por los nervios y la responsabilidad de dirigir al segundo equipo más ganador de la pelota cubana».

El estelar lanzador Norge Luis Vera Peralta también respondió esta noche a la llamada de JIT: «Gran parte de mis hazañas deportivas fueron con Higinio al frente del banquillo, no solo en Santiago, sino como parte de los equipos Cuba. Tantas veces se me acercó y me dijo: Hoy te toca.

»Salía al terreno y daba lo mejor de mí, agradecido por la confianza que había depositado Higinio, mis compañeros y todo un país. Fueron momentos inolvidables, como inolvidable será ese gran director».

Higinio Vélez Carrión nació en el santiaguero municipio de Songo-La Maya el 27 de julio de 1946. Practicó beisbol, y como parte de su afán de aprendizaje se graduó en la entonces Escuela Superior de Educación Física.

Brilló como mánager en su provincia natal y fue ganador de cuatro series nacionales, tres series selectivas y dos copas Revolución.

Internacionalmente estuvo al frente de los elencos coronados en los Juegos Panamericanos de 1987 y 2003, las copas mundiales de 2001, 2003 y 2005, y los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. Dos años después alzó el subtítulo en el I Clásico Mundial de Beisbol.  

Ejerció el mando de la Dirección Nacional de Beisbol entre 2007 y 2014, y a la condición de titular de la Federación Cubana de Beisbol sumó responsabilidades como la vicepresidencia de la confederación panamericana.