ANTE la pandemia producida por la enfermedad COVID-19, el sistema deportivo cubano en general, y la Comisión Nacional de Béisbol (CNB) en particular, se vieron obligados a tomar medidas para preservar la salud de los atletas.

Lo principal ha sido el aislamiento social, de ahí que fuera ineludible interrumpir la preparación grupal tradicional e implantar el trabajo individual en espacios reducidos en las propias residencias personales.

Las condiciones anteriores, evidentemente, produjeron un estancamiento del desarrollo físico, técnico y táctico de los jugadores, y posiblemente un retroceso del nivel de estas cualidades.

Ante tales consecuencias se tomó la decisión técnico-metodológica de diseñar una planificación que se aplicaría al cesar el aislamiento social obligatorio, con una duración de seis microciclos (seis semanas) y el propósito de reactivar los procesos adaptativos a las cargas de entrenamiento.

Para el período se ideó un plan mediante el modelo ATR, el cual proporcionaría la transferencia necesaria para iniciar la 60 serie nacional.

Insistimos en que cada equipo diseñaría su preparación particular, pero ajustada a las siguientes orientaciones:

. Secuenciación de mesociclos basados en la superposición de efectos residuales de las adaptaciones.

. Cargas estructuradas con acentos concentrados en direcciones prioritarias para el mesociclo (no más de tres), que debían ocupar aproximadamente el 40 % del trabajo total. El volumen restante (60 %) debe dedicarse a direcciones alternativas de entrenamiento.

. La preparación debía iniciarse desarrollando las capacidades que generan el mayor efecto residual (Resistencia aeróbica y fuerza máxima).

. La fase posterior debía orientarse hacia el desarrollo de capacidades con efectos residuales medios, tales como la fuerza-velocidad y la capacidad anaeróbica.

. El mesociclo final, de realización, debe incluir las cargas de menor efecto residual, a decir la anaeróbica aláctica y la competición, entre otras.

En el caso del béisbol la orientación de la preparación debe tener un carácter eminentemente integrador, por eso el plan de entrenamiento que detallamos a continuación.

DISEÑO

*Cada equipo debe diseñar la preparación.

El autor es jefe técnico de la CNB.