De emoción también se llora... Yaimé la nueva campeona del disco.Foto: Getty Images.

Doha, Catar.- LA NOCHE se presumía emocionante porque los anfitriones prepararon su fiesta para el saltador de altura Mutaz Essa Barshin. Y lo fue, pero también para Cuba, que acaparó aplausos con el podio doble de Yaimé Pérez y Denia Caballero, las mejores lanzadoras del disco en el presente Campeonato Mundial de Atletismo.

Nunca hubo calma en un Khalifa Stadium colmado de público como no se había visto en las anteriores jornadas. Las banderas cataríes estaban en cada rincón, era la noche de su ídolo y este no los defraudó con su coronación gracias a un salto de 2,37 metros, que es lo máximo de la actual temporada.

Pero era también el día para los cubanos, atentos desde sus casas a las dos guerreras del disco, las dos mujeres que mejor lo habían hecho durante toda la campaña y lo repitieron en el más grande de las competiciones del año.

Yaimé “dio” primero, con un tiro de 68,18 metros envió la alerta de que era en serio su intención de convertirse por primera vez en reina universal y lo cumplió finalmente. Su disparo de 69,17 metros en el quinto intento, poco después que Denia le pusiera presión a la competencia llegando hasta los 68,44, se convirtió en la tercera mejor marca del año.

«Sabía que podía lograr un tiro superior, aunque no estaba trabajando técnicamente bien. Fui hasta donde estaba mi entrenadora y me dijo “rota la cadera y sube el disco…” y así fue. Me concentré y sabía que podía», dijo Yaimé, ya dueña de un título que implicó no pocos retos.

«Pensé que no iba a poder. Me lesioné de la espalda hace tres días y si estoy ahora aquí es por el trabajo del fisioterapeuta Abdel Murguía, sin él esta medalla no hubiera sido posible», comentó casi en un suspiro, pues la emoción de tanto le hizo llorar.

Sin embargo, muy rápido regresó a la cordura, sonrió feliz por esta nueva meta cumplida y confesó que «ahora vengo con más ambición que antes. Soy una atleta que nunca se rinde, pienso en grande y ahora quiero más que antes».

Para Denia, campeona del Beijing 2015, el final tuvo un matiz diferente. Ella celebró el subtítulo casi como si fuese un reinado, porque lo sucedido esta noche le sirvió para ratificar que es también una campeona, y para dejar atrás aquel fantasma de hace unas semanas en los Juegos Panamericanos de Lima.

«Súper contenta, súper motivada, este es un primer paso para el oro olímpico. Tengo muchas personas a las que agradecerle, a mi mamá a mi novio, a mi entrenador por supuesto», fue el rápido resumen de Denia, que por sobre todas las cosas disfrutó rencontrarse con sus buenas marcas.

En definitiva, el podio mundial fue una especie de copia al de las principales certámenes de esta temporada, con la estelar croata Sandra Perkovic escoltando a las cubanas, ahora un bronce de 66,72 metros.

El título se convirtió en el segundo de la historia para Cuba en esta especialidad, y la actuación en general iguala el 1-2 que consiguieron en Roma 1987 las entonces alemanas democráticas Martina Hellmann y Diana Gansky.

BARSHIM PUSO ALTURA EN EL KHALIFA

Todo un espectáculo resultó ver a Barshim saltando en su casa, frente a un público que deliró con cada uno sus intentos y fue recompensado con el mejor registro del año: 2,37 metros.

Monarca de Londres 2017, el ídolo de los cataríes no estaba en un año de buenos registros, pero se preparó para hacerlo aquí, disfrutar la gloria como local sin importar los rivales.

Dos rusos que compiten con bandera neutral, Mikhail Akimenko e Ilya Ivanyuk, le acompañaron en el podio con 2,35 metros y el cubano Luis Enrique Zayas también hacía lo necesario para regresar feliz, porque debutó como quinto a este nivel.

Lo más sobresaliente para él fue sobrepasar por segunda vez en su vida los 2,30 metros, lo mismo con que ganó en Lima, pero ahora sin la sombra de fallos.

Los 2,33 metros le quedaron todavía “grandes”, por lo que buscar ese o registros superiores será una tarea para el futuro más inmediato, aunque lo importante esta vez fue comprobar que está listo para insertarse entre los mejores saltadores de al actualidad.

MUHAMMAD FIRMÓ UN RÉCORD DEL MUNDO

Sin límites volvió a mostrarse la estadounidense Dalilah Muhammad, la mujer que más rápido corría en el mundo los 400 metros con vallas desde el 18 de julio pasado y que repitió ahora la hazaña.

Con 52.20 segundos era la recordista del orbe desde entonces y como si eso no fuera suficiente, este viernes rebajó otras cuatro centésimas de segundo a su plumarca para asaltar por primera vez el centro del podio en estos certámenes.