Lima.- HACE 11 años supo que la natación no sería el camino, y por suerte apareció el pentatlón moderno para demostrar que lo suyo es el deporte sin importar la especialidad.

Así le sucedió al cubano Lester Ders, debutante ahora en Juegos Panamericanos y este domingo en el cuarto lugar de una competición que aún no termina y le puede deparar todavía alguna medalla, aunque por lo pronto ya disfruta con saberse seguro para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Apenas ocho puntos le separaron del bronce que quedó en manos del argentino Sergio Villamayor, pero sin importar la subida al podio son varias las razones para disfrutar el momento, y de eso aceptó conversar unos minutos con JIT que le siguió durante toda la fría tarde limeña en la Escuela Militar de Chorrillos.

¿Pensaste que la clasificación olímpica era posible?

Estábamos tan concentrados en la competencia que no me fijé en eso, sabíamos que podíamos hacerlo. Pero quedar bien era lo primero, el resto ya saldría.

¿Qué fue lo más difícil de la competencia?

Nunca tengo buena la esgrima y antier no me fue mal, sabía que en la natación podría subir y ahora hice el cuarto mejor tiempo de todos (2:04.66), pero incluso yo puedo nadar más rápido… Lo más difícil fue la temperatura, nunca entrenamos con tanto frío, aunque eso es algo que tuvimos todos por igual.

Cambiar de la natación al pentatlón, ¿cuán difícil te fue?

Todo fue bastante complicado, nunca había hecho antes ninguna de estas especialidades, ni esgrima, ni tiro ni carrera y mucho menos equitación, pero cuando empecé a correr se me daban bien las cosas y eso me hizo embullarme.

Aprender esas habilidades con más de 17 años…

Mucha paciencia necesitaron los entrenadores, decían que tenía potencial e insistieron y salió… pero me cuesta mucho trabajo la esgrima, los deportes de combate no son lo mío, eso me choca muchísimo y hoy en día todavía tengo problemas con eso.

¿Y la equitación no es lo más complicado?

La equitación es suerte y verdad, depende del caballo que te toque… pero me siento bastante bien montando. Tenemos por suerte un entrenador muy bueno, Arturo Abelenda, y siempre nos dice a este caballo hay que hacerle esto o lo otro, tienes que estar bien sentado… incluso ahora mismo derribé tres obstáculos al principio del recorrido y él me dijo no te pliegues tanto de frente, porque lo estaba haciendo muy duro y luego de eso pasé limpio por el resto de la cancha.

Ya tienes Tokio seguro, ¿pensaste qué significará eso?

Nunca mentalicé eso de ir a unos Juegos Olímpicos, ahora creo que tengo que asumirlo y comenzar a prepararme, ver con los entrenadores, planificar qué haremos de aquí a allá…

¿Entonces feliz con la clasificación, pese a no tener la medalla?

Claro que eso añade felicidad.

¿Y habrá medalla?

Mañana vamos a buscarlas y pasado también…