La Habana.- SI SE realizara una encuesta para elegir al mejor árbitro del béisbol cubano en la actualidad, muchos aficionados optarían por el mayabequense Jorge Niebla Rodríguez.

Los cubanos saben mucho de pelota y distinguen la calidad cuando se habla de un hombre o mujer, vestidos de oscuro, parados bien cerca de las almohadillas. JIT quiso acercarse a la carrera de este umpire, quien se muestra impasible dentro y fuera del terreno.

Con 51 años de edad y 13 series nacionales a cuesta, Niebla se ha ganado el respeto de la grada por su imparcialidad y un certero trabajo en los partidos decisivos de la pelota cubana. Se trata de un ejemplo a seguir.

¿Cómo se vincula al béisbol?

Lo jugué en las categorías inferiores, pero sin grandes resultados. Ya con más de 30 años me llamó la atención el arbitraje y comencé en esta difícil profesión.

Hábleme de esos inicios…

Fue en mi terruño natal, el central Amistad con los Pueblos del municipio Güines. Me vio el comisionado municipal, me habló de un proyecto para formar árbitros y ahí empezó todo.

¿Cuán complicado fue el recorrido hasta las series nacionales?

Bastante difícil, y llevó tiempo. Primero pasé un curso en la antigua provincia La Habana. Después trabajé en los campeonatos provinciales hasta que me enviaron a un curso zonal.

Por los buenos resultados pasé a la Escuela Nacional de Árbitros Rafael de la Paz, que funcionaba en Santa Clara, y allí me formé durante tres años.

Llegué a las series nacionales en 2007 como suplente, y ya en 2009 comencé a ser fijo. En las últimas dos series me han designado como el mejor árbitro.

¿Momentos difíciles durante estos años de labor?

Esta profesión es muy ingrata. Una temporada estuve trabajando muy bien y no me seleccionaron para los play off. Eso duele porque a la postemporada van los mejores. Los otros ejemplos son jugadas en que me he equivocado y siempre queda la insatisfacción por no ser justo.

¿Cuál es la base más difícil para trabajar?

Para mí la antesala, por una sola razón: vamos muy confiados allí debido a que suceden pocas acciones. Entonces, cuando ocurren, nos toman por sorpresa en muchas ocasiones. Me siento muy cómodo detrás de home, pero prefiero la primera base.

La tecnología ha llegado para quedarse en la pelota…

No estuve de acuerdo al principio, pero ahora lo veo bien. El replay ayuda a ser más justos y sirve para evaluar con certeza nuestro trabajo. No obstante, todavía falta la tecnología necesaria para apreciar mejor las jugadas.

¿Cómo ocurrió el estreno en eventos internacionales?

Mi primera competencia fue la Serie del Caribe de 2015, pero en esos torneos los cubanos solo trabajamos en las líneas. Desconozco las razones de eso y ojalá cambie para otras citas.

Participé en el Pre-Clásico Mundial de Panamá 2016, donde me encargué detrás de home del primer juego. Luego estuve en el Mundial Juvenil de 2017 en Canadá, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla 2018 y en el Mundial Sub-23 que se celebró allí mismo.

En 2017 fue designado como el mejor árbitro por la Confederación Mundial de Béisbol-Softbol (WBSC)…

Obedeció a mi labor en el Mundial Juvenil de Canadá, muy fuerte por la calidad de los equipos. Siempre trabajé en home y primera. Tuve un buen desempeño, pero no esperaba la elección como árbitro principal de la final entre Corea del Sur y Estados Unidos. Lo hice bien y los federativos me felicitaron.

Ese premio de la WBSC me llevó a ser nominado como el mejor árbitro internacional de Cuba en 2017, y por supuesto del béisbol. Ha sido el mayor reconocimiento a mi carrera.

¿Qué necesita el arbitraje cubano para mejorar y crecer?

Se retomó la escuela nacional con muchachos jóvenes, eso es positivo porque garantiza el relevo. También se requiere perfeccionar la labor a través de los seminarios anuales. La comisión de reglas y arbitraje se está ocupando fuertemente de ese aspecto.

Lo primordial es el trabajo. Los árbitros de provincia tienen que actuar a todos los niveles para avanzar, para ganar en calidad y seguridad.

¿Cuánto le queda en este “mundillo” de las bolas y los strikes?

Me siento bien físicamente, aunque paso de los 50 años. Participo en todas las categorías, prácticamente sin descanso. Espero que la salud me acompañe para ejercer durante algún tiempo más.

Al cierre del diálogo supimos que ya está convocado para el Torneo Premier 12 de noviembre venidero, un alto que hará dentro de la 59 Serie Nacional de Béisbol. Un reconocimiento más a quien sabe ejercer justicia desde la maestría en su profesión.