La Habana.- MUY POCAS cosas quedaban sin definir en la última jornada del Torneo Clausura de la 106 Liga Nacional de Fútbol, entre esas el líder de la etapa regular, aunque se sabía habría revancha para Artemisa ante Santiago de Cuba en la final.
Los occidentales marchaban primeros y difícilmente en casa, ante Las Tunas, perderían el liderato. En efecto, sucedió.
Los Guerreros propinaron una goleada sin piedad a los visitantes, que sirvió para definir otra de las pugnas más enconadas, deportivamente hablando, de la Liga: la del líder goleador.
Allí también dirimían Diablos Rojos y Guerreros, quienes comienzan a tejer una rivalidad peculiar en el fútbol cubano. El santiaguero Jorge Villalón llegaba delante de los artilleros con 19 dianas, una sobre el artemiseño Yasnay Rivero.
Pero el 7-1 ante Las Tunas le reservó a "Pocholo" un doblete con que aventajó al "Villano", 20 goles por 19, como el máximo anotador del campeonato.
Además de los goles de Rivero (8' y 54'), marcaron Lázaro Noel Ramos (40'), Romario Torres (56'), José Antonio Almelo (59'), Víctor Caraballo (62') y Yoelvis Cardozo (70'). Cuando la tempestad artemiseña bajó la intensidad, Cristian Valiente puso la honra tunera, de penal al 81'.
Los santiagueros tuvieron que conformarse con el 4-0 ante La Habana en el estadio Antonio Maceo, que no es poco. Hasta pudiera parecer un aviso a sus rivales de la final sobre lo que son capaces de hacer en el césped sintético de la Heroica Ciudad.
Pablo Labrada (11' y 67'), Eduardo Hernández (67') y Asmel Núñez (86') enseñaron que Santiago tiene muchísimas armas para hacer daño.
Camagüey atrapó en solitario el tercer lugar del campeonato, otra pugna que llegó a la última fecha frente a La Habana. Quizá eso no consuela a los Miuras, que dominaron gran parte del torneo y apuntaban más alto.
Será difícil que no les pese el recuerdo de un empate en La Polar ante los Leones que celebraron como una victoria, sin arriesgar para ganar los tres puntos, luego de sacar las cuentas con una calculadora rota.
En la ecuación no estaba la derrota ante el colero Villa Clara, el tiro de gracia más despiadado para un conjunto que prestigió el campeonato con muy buen fútbol.
Este último partido ante Cienfuegos sirvió para cerrar las puertas del Amador Fernández hasta el próximo torneo y para que Camagüey y Cuba le dijeran adiós a uno de los mejores futbolistas que jugó en las ligas domésticas: Armando Coroneaux.
Mandy se fue como vivió en los terrenos, con gol, el 112 de su fructífera carrera, que lo reafirma en el selecto club de los "centenarios" en nuestras ligas.
Greibel Palma (60') y el compañero de mil batallas de Coroneaux, Yaidel Romero (63'), acompañaron al veterano de 37 años de edad con goles en la victoria de 3-0 sobre Cienfuegos.
Por último, acabaron las angustias para un histórico, Villa Clara. El máximo ganador de torneos en Cuba dio una imagen impropia de un grande.
Apenas siete puntos en 14 jornadas y 47 goles encajados amargan el paso del Expreso del Centro por el Clausura.
El 1-5 recibido en la emblemática cancha del Camilo Cienfuegos de Zulueta ante Guantánamo resultó el enésimo batacazo. Geoge Guibert (35' y 61'), Alexey Zuaznabar (37'), Isael Vega (45') y Rigoberto Naranjo (85') golearon para los Titanes del Guaso. Roberney Caballero (63') puso el único tanto de los locales.
El campeón de la Liga se definirá en partidos de ida y vuelta entre Artemisa y Santiago de Cuba, que se verán las caras en el Antonio Maceo el próximo 3 de diciembre antes de cerrar el match el día 10 en el terreno Grandes Alamedas de Ceiba del Agua.
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