Por Joel García, enviado especial de Trabajadores

Barranquilla.- UNA TARDE casi perfecta describieron nuestros taekwondocas en la penúltima jornada de competencia de este deporte, al conseguir tres oros por intermedios de Glienys Castillo (62 kg), José Cobas (74 kg) y Rafael Alba (87 kg), mientras Glenhis Hernández (73 kg) concluía con una plata que bien merece unas líneas aparte.

La primera en ascender a la cima fue Castillo, quien protagonizó un peleón final contra la mexicana Anel Felix, pues tuvo que remontar un 3-7 del asalto inicial hasta terminar ganando 11-10 con una patada efectiva al pecho en los últimos dos segundos del tercer round. “Es mi primera competencia internacional y soy la mujer más feliz hoy”, declaró la joven santiaguera.

Para quien no salía ni siquiera con etiqueta de favorita, lo vivido este 22 de julio en el Coliseo del Colegio Marymount clasifica como una gran sorpresa, fruto de cumplir la estrategia de ser ella la que marcara el ritmo del combate hasta el final para aprovechar su buena preparación física. “En los segundos finales pensé que se me escapaba, pero pude marcar limpiamente”, recordó.

Por su parte, Cobas y Alba dieron disertaciones del mejor taekwondo de la región y vencieron en sus tres presentaciones sin grandes complicaciones, mientras en la final derrotaron al azteca René Lizarraga (21-18) y el boricua Brian Ruidiaz (23-2), respectivamente, válido para repetir sus doradas de Veracruz 2014. “Fue muy buena la preparación de tres meses en Perú y agradezco también el trabajo del médico que me permitió llegar hasta aquí. El sacrificio valió la pena y demostramos que siempre hay que contar con nosotros”, señaló el primer dorado del equipo varonil y natural del reparto Aldabó, en La Habana, al cual dedicó también su éxito.

“Hay que decir que tuvimos que hacer un doble trabajo porque salimos en los primeros combates contra los mejores del ranking. Ojalá y de cara a los Juegos Panamericanos aparezcan más competencias para nosotros, porque aunque nos respetan en América necesitamos más roce internacional”, señaló Cobas, uno de los más entrevistados por la prensa especializada.

En el caso de Alba se mostró feliz y muy seguro por el inicio del ciclo 2018-2010, que añora sea definitorio para lograr la medalla olímpica que no pudo guardar en Río de Janeiro 2016. “No tengo gran rivalidad en Centroamérica y del Caribe, pero siempre reconforta probarte y contribuir al propósito de ganar el deporte por países y ganar los Juegos por países.

Finalmente, el segundo lugar de Glenhis, una de las dos monarcas del orbe que prestigia esta disciplina en esta lid, reflejó el valor de una atleta que había tenido deudas con el entrenamiento, pero solo cedió en el último segundo del asalto conclusivo contra la puertorriqueña Cristal Weekes (5-8).

“Me siento contento y satisfecho con su trabajo porque al final luchó contra su propia reserva física. Por su calidad, entrega y ejemplo merece la felicitación y que gente conozca eso. Pocas veces se explica una plata y lo hago sin justificación, solo reconociendo lo que hecho”, dijo su entrenador Amaranto Delisle.

Cuando solo resta una fecha para el cierre del taekwondo, Cuba ya superó su actuación dorada de Veracruz y marcha segunda en la tabla de medallas (4-1-1), solo antecedida por México (7-4-3).