Foto: JIT Colaborador

Por Eyleen Ríos, enviada especial

Tampere, Finlandia.- ESTA tarde comenzará a tejerse el camino para el triplista cubano Jordan Díaz, una de las estrellas este Campeonato Mundial de atletismo sub-20 al que solo le restan tres jornadas y ya ha dejado varios récords para la competencia, pero ninguno del orbe.

Precisamente es ese el objetivo anunciado por el caribeño «ir por el récord de 17,50 metros que lleva más de 30 años», con esa idea en mente competirá en el Estadio Ratina, pero no será este jueves cuando más expectativas despierte la meta.

Hoy solo se dedicará a asegurarse para la final de este viernes. Será uno de los 21 involucrados en el salto triple y solo necesitará más de 15,80 metros para acceder directo a la discusión de medallas.

Jordan, que cumplió 17 años en febrero pasado, es el único con más de 17 metros entre los inscritos, pero centrarse en el objetivo, no desesperarse, ni sentir demasiada confianza por su condición de súper favorito, son tareas que deberá asumir para que las cosas salgan bien.

Su progresión en el triple deja muy claro que es uno de los mayores talentos salidos de la escuela cubana de esa especialidad. En el 2015 con apenas 14 años consiguió 14,60 metros, una temporada después saltó 15,23 y en el 2017 ganó el certamen universal para cadetes en Nairobi con la mejor marca de todos los tiempos de esa categoría: 17,30.

En el actual 2018 pasó por 17,32 y hace apenas unas semanas anotó los 17,41 con que “rompió” la marca nacional sub-20 que había impuesto Pedro Pérez dueñas en los Juegos Panamericanos de Cali 1971.

El resumen de lo logrado por Jordan no admite discusión en cuanto a su calidad, pero le tocará ahora demostrar una vez más que el hombre del momento en el triple juvenil.

Le toca además demostrar que está listo para mantener una tradición de ganadores en el evento que más medallas ha aportado para la Isla a este nivel.

De las 27 medallas de oro de Cuba en estos certámenes, seis son del triple masculino, y desde Barcelona 2012 los títulos han viajado a la Isla consecutivamente.

Lázaro Martínez, campeón en Eugene 2014 y Bydgoszcz 2016 es el único con par de cetros, otra hazaña que por edad Jordan pudiera igualar… pero le toca comenzar la historia desde esta misma tarde…

CLASIFICACIONES DE LA MAÑANA

La saltadora de altura Isis Kayla Guerra pasó a la final de manera directa con los 1,84 metros que exigían. Los 1,80 fueron la altura más complicada, pues necesitó apelar a los tres intentos para sobrepasarla.

La única medalla de Cuba en estas citas es el bronce de Lesyaní Mayor en el 2008.

En el heptatlón Adriana Rodríguez saltó 6,31 metros en la longitud y tiró 34,74 en la jabalina. Con esos registros descendió al cuarto puesto con 5147 puntos y necesitará los mejores 800 metros de su vida en el cierre para “colarse” en medallas.