Por Roberto Ramírez, enviado especial

Barranquilla.- A NUEVE días de su inauguración, los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe no proyectan el despliegue promocional que pudieran imaginar los viajeros llegados a esta urbe.

Aunque los más observadores identificarán allí a personas portadoras de uniformes vinculados con la cita, lo cierto es que el aeropuerto carece de pancartas y mensajes electrónicos que suelen utilizarse para estos casos.

Pero tal realidad impera más allá del recinto, donde se aplaude que los organizadores den la bienvenida y contribuyan a agilizar los trámites de las “avanzadas” arribadas para garantizar respuestas a requerimientos logísticos de sus delegaciones.

Las calles de la ciudad tampoco proyectan abundancia de mensajes en torno a una lid que recién ratificó sus vaivenes con el “rescate” de 14 de las 22 pruebas eliminadas por no reunir a exponentes de cinco países.

La noticia coloca en 450 los títulos a disputarse del 19 próximo al 3 de agosto y se difundió a solo horas de que comenzara la oficialización definitiva de las nóminas, a base de despachos de las misiones con la división técnica de la confrontación cuatrienal.

«Serán los segundos juegos con más competencias en desarrollo, solo superados por los realizados en Mayagüez 2010, en los cuales se llevaron a cabo 492 campeonatos», puntualiza la nota emitida por el Comité Organizador.

En medio de no pocas incertidumbres el retorno de esos eventos se asume como positivo, aunque generará reajustes en materia de inscripciones y vaticinios.

Cuba es parte de ese imperativo, pues tiene opciones en la división de 77 kilos del levantamiento de pesas, los relevos para mujeres y mixto del pentatlón y el doble entre damas del remo, que integran el grupo de los “retornados”.

Entretanto alientan los adelantos constatados en un complejo de piscinas que llegó a verse “negro con pespuntes grises”, la tecnología contratada para esa y otras instalaciones y el concepto bioclimático defendido en función de ellas.

También resalta el componente de paisajismo diseñado para los que el alcalde Alejandro Charal consideró «los mejores escenarios del país y algunos de ellos, hasta de Latinoamérica».

Entretanto la simbólica llama que encenderá el pebetero continúa su paso por los municipios del Atlántico, y este martes desata fiestas en Campo de la Cruz, Candelaria, Ponedera, Manatí y Sabanalarga.

Simultáneamente crecen las expectativas relacionadas con el show de apertura, denominado Barranquilla 2132, a cargo de la empresa Performance y con sede en el estadio Metropolitano.

De acuerdo con autoridades, están a la venta 27 mil boletas y Shakira devendrá atractivo especial que complementará la modelo y presentadora Paulina Vega, quien se declaró «orgullosa de participar».

Esas y otras aristas son parte del conteo regresivo hacia un acontecimiento que reserva lo mejor para el plano deportivo, con Cuba en defensa de un liderazgo ejercido desde 1970 y la dupla Colombia-México empeñada en evitarlo.

El otro gran examen será para los organizadores, llamados a concretar acciones que terminen por dejarles bien parados en la cuarta ocasión en que la nación cafetera acoge estas celebraciones.