Por Eyleen Ríos, enviada especial
Roma.- PARA el cubano Juan Miguel Echevarría este jueves resultó uno de esos días en que no es necesario ganar para sentirs satisfacción.
Razones le sobran para celebrar la marca personal de 8,53 metros con que finalizó segundo en el salto de longitud de la Golden Gala Pietro Mennea, su debut en la Liga del Diamante de atletismo.
«Claro que estoy feliz, súper contento y sé que puedo más», confesó a JIT sin sombra de petulancia a su paso por la Zona Mixta del Estadio Olímpico de esta ciudad, donde nuevamente enfrentó tú a tú a una de las principales estrellas del momento.
Se sabía que el duelo sería contra el sudafricano Luvo Manyonga, rey del orbe en el 2017, subtitular olímpico un año antes y ganador ahora con 8,58 metros, quien ya conoce cuánto debe cuidarse del antillano.
Juan Miguel –de apenas 19 años- le derrotó en el certamen universal bajo techo de principios de este año, y aunque ahora no pudo ser mejor, ofreció otra muestra de talento y progresión estable.
«Es mi primera vez en un Diamante, y la primera del año al aire libre. Todavía tengo muchos detalles técnicos que pulir y por eso tantos foul», explicó sobre los cuatro intentos en que pisó más allá de los límites permitidos.
«Incluso en uno de ellos, el más "cerradito", se acercó mucho a los nueve metros», comentó su entrenador Daniel Osorio, el hombre detrás de sus resultados en el último año, mientras mostraba una foto del instante.
«Nunca me pongo nervioso, me gusta la presión y compito mejor», aseguró interrogado sobre lo que significa saberse el cubano más seguido en estos momentos en el deporte rey y por demás enfrentado a un Manyonga que es también “de competencias”.
«Repito, lo único que necesitamos es trabajar más, seguir como estamos, centrados en los resultados y buscar el oro en los centroamericanos, que es la meta», recalcó instantes antes de ser “apurado” para la premiación.
Juan Miguel anotó su anterior marca personal en el evento cierre de macro, que se disfrutó en la ciudad de Camagüey, donde saltó 8,40 metros.
El también sudafricano Ruswahl Samaai se encargó de quedarse con la tercera plaza con salto de 8,34 metros, en tanto el otro exponente de Cuba en competencia, Maikel Massó, fue octavo con 7,92.
«Estuve lesionado y esta es apenas mi segunda competencia, tengo que ir mejorando, pero lo principal es que me sentí bien, sin molestias», comentó por su parte Massó, quien en julio buscará retener su cetro mundial juvenil en Tampere.
«Eso viene primero y luego a buscar medalla en Barranquilla», confirmó.
Antes, la Isla disfrutó de los puestos dos y tres de las discóbolas Yaimé Pérez (66,82 metros) y Denia Caballero 63,48), superadas por la croata Sandra Perkovic (68,93) , dueña de récord para el mitin.
Entre los restantes resultados sobresalió la rusa -que compite bajo bandera neutral- Mariya Lasitsken, ganadora del salto de altura con 2,02 metros que validaron su victoria 40 consecutiva.
El estadounidense Sam Kendricks dominó el salto con pértiga (5,84 metros) y su compañero Ronnie Baker inscribió marca del año y personal con 9.93 segundos en los 100 metros planos.
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